El verano, además de calor, nos trajo algunas novedades y algún que otro soponcio en el plano de la vida nacional e internacional.
¡Cómo está el patio!
Creo que nos espera un curso político ligeramente agitado.
Tal vez tengamos un otoño o unas "navidades" calientes, porque las cosas andan revueltas.
A nivel internacional la cosa tampoco está como para tirar cohetes.
Veremos cómo se desenvuelven los acontecimientos...
Así que, de momento, vuelta a la rutina, a los quehaceres de siempre, al trabajo los más afortunados...
Cuidado con el síndrome postvacacional.
Para el autor de este blog, el futuro inmediato se le presenta interesante y movidito.
Seguiremos habitando esa zona intermedia que se sitúa entre la Historia y la Literatura, gracias a los fragmentos de "En la frontera" que seguiré publicando periódicamente.
También aparecerá una colaboración mía de vez en cuando en La Charca Literaria donde abro sección propia.
Y tal vez, en un mes o dos, haya alguna novedad más.
Digo tal vez, porque, por ejemplo, entre este mes y el que viene me cambio de casa, a una algo más pequeña, toda en una planta, y me esperan unos días agitados con los cambios, la mudanza, los trámites... por lo que no os extrañe si, de pronto, "desaparezco" y no me conecto en unos días. Por otra parte, no sé dónde voy a meter todos los bártulos, incluyendo los libros, los cómics, los discos... Cajas y más cajas. Es lo que tienen las mudanzas: muebles ¡y cajas! Me consuela pensar que, en la última que haga en esta vida, tan solo necesitaré una; aunque espero que sea en un futuro muy lejano, que todavía tengo cuerda para rato.
Seguiremos habitando esa zona intermedia que se sitúa entre la Historia y la Literatura, gracias a los fragmentos de "En la frontera" que seguiré publicando periódicamente.
También aparecerá una colaboración mía de vez en cuando en La Charca Literaria donde abro sección propia.
Y tal vez, en un mes o dos, haya alguna novedad más.
Digo tal vez, porque, por ejemplo, entre este mes y el que viene me cambio de casa, a una algo más pequeña, toda en una planta, y me esperan unos días agitados con los cambios, la mudanza, los trámites... por lo que no os extrañe si, de pronto, "desaparezco" y no me conecto en unos días. Por otra parte, no sé dónde voy a meter todos los bártulos, incluyendo los libros, los cómics, los discos... Cajas y más cajas. Es lo que tienen las mudanzas: muebles ¡y cajas! Me consuela pensar que, en la última que haga en esta vida, tan solo necesitaré una; aunque espero que sea en un futuro muy lejano, que todavía tengo cuerda para rato.
Te esperamos ansiosos, Cayetano.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ahora me voy unos días para airearme y a la vuelta empezamos con nuevas cosas.
EliminarUn abrazo, Paco.
Bien hallado y que la mudanza sea leve. Cajas con quince kilos de peso como mucho, que si no hay riesgo de hernia.
ResponderEliminarLLevo alguna mudanza a mis espaldas, y conozco el "paño".
Un abrazo.
La mudanza será posiblemente a finales de septiembre o a principios del próximo mes. Contrataré los servicios de alguna empresa recomendable para evitar lesiones. No es rentable gastarse luego el dinero ahorrado en fisioterapeutas e ibuprofeno.
ResponderEliminarUn abrazo, Rodericus.
Que sea leve la mudanza, Cayetano, piensa que para Navidad (el tiempo pasa volando) estará prácticamente olvidada y disfrutarás de nueva vivienda.
ResponderEliminarUn saludo y paciencia.
Un saludo
Espero, Carlos, que no tenga que hacer otra dentro de un año. No lo quiero ni pensar. Jejeje.
EliminarUn saludo.
Pues bienvenido, don Cayetano. Yo tendré mi primera guardia el sábado, y ya estoy sufriendo el síndrome postvacacional jejeje
ResponderEliminarLas mudanzas son infernales, espero que sobreviva a ella.
Un saludo.
Afrontaremos las cosas según vayan viniendo.
EliminarUn saludo, Dissortat y buena reentrada laboral.
Y digo yo que una mudanza en perspectiva es duro, pero...¿Y los brazos que se te van a poner a lo Chuacheneguer? ¿Y el desarrollo mental que te dejará tanta etiqueta y el recuerdo de tanto recuerdo? Eres un privilegiado.
ResponderEliminarSaludos desde dos preparativos.
Hoy por hoy simplemente aspiro a no agobiarme. Ya me he dado seis o siete viajes con el coche al "punto limpio" para tirar cosas. Ni te imaginas lo que sale de una casa de cuatro plantas donde se ha vivido veinte años con dos hijos.
EliminarMañana me iré unos días fuera para tomar fuerzas para lo más gordo que vendrá después.
Un saludo, Ana Mª.
Ufff, ahora que acabo de acabar con mi triplete mudancero nacional y me he venido a Denia para descansar este mes. Lo mío ha durado casi cinco años de norte a este pasando por el centro y con diversos avatares intermedios. Em el entretiempo siento que envejecí, ahora pienso recuperarme!!! Suerte con la mudanza!!!!
ResponderEliminarComo le comentaba a Paco y a Ana, ando algo agobiado con los preparativos. Me iré unos días, pocos, para retomar fuerzas para lo más gordo que vendrá en unas semanas.
EliminarTú de este tema sabes más que nadie.
Un saludo, Emejota.
Pues sí que comienza usted agitado la nueva temporada! Vale más no pensar en tanto trajín. Espero que al menos venga con las pilas bien recargadas para afrontarlo.
ResponderEliminarBienvenido de regreso a la blogosfera!
Bisous
De hecho, hoy me voy cuatro días para no pensar demasiado en lo que viene ahora. Agobio.
EliminarSaludos, madame.
Hola Cayetano:
ResponderEliminarNo te envidio...con lo de la mudanza...Ya llevo unas cuantas, incluso cambio de país (dos veces...)
Bienvenido nuevamente. Me agrada venir a tertuliar por estos rumbos.
Saludos
Lo tuyo fue una "supermudanza": cambio radical de todo, menos de idioma, menos mal.
EliminarSaludos, Manuel.
Para mi, las mudanzas, además de engorrosas, siempre suponen dejar algunos pedazos de vida atrás, pedazos que en su momento fueron importantes y hoy ya no queda sitio para ellos. Lo bueno es que también sirven para hacer limpia.
ResponderEliminarSuerte con la mudanza: con el resto de proyectos estoy seguro que te irá estupendamente... y nosotros que lo disfrutemos.
Saludos
Gracias, Xibelius. Ya ando de vuelta.
EliminarUn abrazo.
Después de casi tres años alejado del mundo de los blogs, me alegra pasar por aquí y comprobar toda la actividad que has continuado llevando a cabo, Cayetano, y los proyectos que propones en tu entrada son muy interesantes, me mantendré al tanto.
ResponderEliminarYo acabo de retomar la actividad hace nada con un nuevo espacio. El Trovador Errante queda en desuso definitivamente, pero no cerrado, así que estoy encantado de invitarte a pasar por:
En un lugar desolado... - Los Vacuos Mundos
http://losvacuosmundos.blogspot.com.es/
¡Un saludo y te voy leyendo!
Gracias, Pedro.
EliminarPara mí, un honor y un motivo de alegría verte de nuevo por estos andurriales.
Un saludo.
¡jajajajajajajaja Cayetaaaaaano! ¡y que sea dentro de muuuuuuuuuuuuchísimos años!
ResponderEliminar¡Feliz mudanza! ¡qué sea con suerte! ¡ánimo!. Algo bueno que tienen las mudanzas es que uno se deshace de lo que no usa o no le sirve, que tiene por si... "las moscas".
jajajaja lo de la tarjeta tiene injundia jajajaja
Besos y gracias por tus comentarios en casa
durante el verano.
Ya andamos de vuelta. Intentaremos tomarnos las cosas según vengan.
EliminarUn abrazo, Myriam.
Vaya lío!! En estos momentos te das cuenta de todas las cosas prescindibles que guardamos. Aprovecha y tira, regala, dona, como dicen los "autoayuda" eso es bueno para el espíritu (jiji)
ResponderEliminarQue te sea leve.
Besos, Cayetano
El problema son los libros. Donde voy no me cabe ni la mitad. En muchos sitios ni los quieren. En otros tienes que llevarlos tú. Y no estoy por la labor de alquilar una furgoneta para llevarlos. Igual se los dejo en parte al comprador de la casa y que haga lo que quiera con ellos. Ojos que no ven...
EliminarUn abrazo, Arantza.
Hola Cayetano, al menos mientras estés de mudanza, no pensaras en lo calentito que está el país y si vamos a terceras elecciones más aún.
ResponderEliminarTu nueva andadura me encanta. Suerte en todo amigo.
Un abrazo.
Eso sí, andaré preocupado y agobiado por lo mío. A los políticos que les den. Jejeje.
EliminarUn abrazo, Conchi.
Uy! La mudanza...algo que yo también debo enfrentar en pocos meses! Menos mal que has descansado primero...luego quedarás para unas nuevas vacaciones!Ja! Abrazo Cayetano!
ResponderEliminarLo mío ya es cuestión de semanas. A ver si pasa pronto.
EliminarUn abrazo, Patzy.
Las mudanzas sirven también para limpiar y quedarse con lo realmente importante. Cuida los libros, los discos... que eso son joyas.
ResponderEliminarUn saludo.
Has dado en el punto central del asunto: quedarse uno con lo realmente importante. Esperemos acertar.
EliminarUn saludo.
Te veo desaparecido por un tiempo, amigo, porque las mudanzas y las obras se sabe cuándo empieza pero no cuándo ni cómo acaban. En todo caso los seguidores estaremos tranquilos pensando que no has sido abducido por los acontecimientos presentes o pasados, sino por los operarios de las mudanzas.
ResponderEliminarPaciencia y mucho ánimo con todo lo que emprendas, y bienvenido, claro.
Un saludo
Digamos que estoy en fase "intermitente" porque hay muchas cosas que tirar, resolver y empaquetar. Lo gordo viene a finales de este mes y principios del que viene. Me lo tomaré con calma, si es que puedo.
EliminarUn saludo, Carmen.