sábado, 28 de noviembre de 2009

Teodora, de cortesana a emperatriz de Bizancio.



La Emperatriz Teodora de Bizancio

Siglo VI de nuestra era. Imperio Bizantino. Teodora, de origen plebeyo y dudosa reputación, era la esposa de Justiniano.
Se dice que tuvo una vida disoluta antes de su matrimonio con el emperador bizantino.
De pasado farandulero, artista circense, pertenecía al grupo profesional de las “cortesanas” que acompañaban a los cómicos, enseñando sus partes y provocando a los espectadores, con los que después solía tener trato carnal.
Justiniano se enamoró perdidamente de ella y tuvo que cambiar la ley para poderse casar con una prostituta, permitiendo al resto de la población el poder hacer lo mismo.
Una vez esta dama llegó al poder, logró introducir cambios legislativos que favorecían a las clases populares, sobre todo a la mujer, como por ejemplo la primera ley del aborto, despenalizó el divorcio y la bigamia, permitió la prostitución siempre que no fuera algo obligado por terceras personas, de hecho los violadores eran condenados a muerte. Todos esos cambios se recogen en el “Corpus Iuris Civilis” o Código de Justiniano, compendio de leyes romanas tradicionales y de su época.
Procopio de Cesarea era el historiador fundamental de este momento, a quien se atribuye una Historia secreta donde pone a caldo al emperador y a su señora, a la que tilda de ninfómana y pervertida sexual. El grado de objetividad del historiador está puesto en duda:

Pero tan pronto como llegó a la adolescencia, y estaba ya preparada para el mundo, su madre la puso en el escenario. Inmediatamente se hizo cortesana, de la clase llamada infantería tal cual los antiguos Griegos solían llamar a una mujer común , pues ella no tocaba la flauta o el arpa, ni entrenaba siquiera para bailar, sino que sólo entregaba su juventud a cualquier persona con que se encontrara, en total abandono”.
En materia de placer nunca fue derrotada. A menudo iba a merendar al campo con diez hombres o más, en la flor de su fuerza y virilidad, y retozaba con todos ellos, durante toda la noche. Cuando se cansaban del deporte, se acercaba a sus criados, treinta quizá en número, y luchaba en duelo con cada uno de ellos; e incluso ni así encontraba alivio alguno a su deseo. Una vez, visitando la casa de un caballero ilustre, dicen que se situó en el extremo más alto de su triclinio, alzó el frontal de su vestido, sin rubor, y así enseñó negligentemente su impudicia. Y aunque abría de par en par tres puertas a los embajadores de Cupido, se lamentaba de que la naturaleza no había abierto semejantemente los estrechos de su pecho, para que pudiera allí haber ideado otra recepción a sus emisarios. ”
Pero cuando regresó a Constantinopla, Justiniano se enamoró apasionadamente de ella. Al principio la mantuvo sólo como su amante, aunque la elevó a rango patricio. A través de él Teodora pudo inmediatamente adquirir un perverso poder y unas muy grandes riquezas. Le parecía ella la cosa más dulce del mundo, y como todos los amantes, deseaba agradar a su amor con todo posible favor y regalarla con toda su riqueza. La extravagancia añadió combustible a las llamas de la pasión. Con la ayuda de ella para gastar el dinero saqueó al pueblo más que nunca, no sólo en la capital, sino a lo largo del Imperio Romano.”
Procopio de Cesarea, Historia secreta, Segunda parte, cap IX.
Nota: el subrayado es mío.
Teodora es considerada santa por la Iglesia ortodoxa y su santo se celebra el 14 de noviembre


miércoles, 25 de noviembre de 2009

Calígula


Fuente de la imagen


Cayo César Augusto Germánico, Calígula, tercer emperador romano de la dinastía Julio- Claudia entre los años 37 y 41 de nuestra era, llamado así porque de joven acostumbraba a calzar las caligae o sandalias de los soldados romanos, ha pasado a la historia como un ser caprichoso y depravado, capaz de cometer los crímenes más atroces. 

La wikipedia dice al respecto:

Existen pocas fuentes supervivientes que describan su reinado, ninguna de las cuales le refiere de manera favorable; por el contrario, las fuentes se centran en su crueldad, extravagancia y perversidad sexual, presentándole como un tirano demente. Aunque la fiabilidad de estas fuentes es difícil de evaluar, de acuerdo con lo que se conoce a ciencia cierta acerca de su reinado, trabajó incansablemente a fin de aumentar la autoridad del princeps; teniendo que hacer frente a varias conspiraciones surgidas con el objeto de derrocarle y luchando a fin de reducir la influencia del Senado, aplastando la oposición que este órgano legislativo continuaba ejerciendo. Se convirtió en el primer emperador en presentarse ante el pueblo como un dios.(1)

Suetonio y Dion Casio son los historiadores que con mayor profusión nos han dejado constancia de las barbaridades cometidas por este excéntrico personaje y nos lo describen como un pervertido sexual y demente, como un ser perverso y cruel capaz de cometer las mayores maldades. Casi todo lo que cuentan son anécdotas y una lista de salvajadas perpetradas por él. Se sabe que los sectores de donde provenían esos historiadores estaban enfrentados con el emperador. La perspectiva de los hechos puede sufrir distorsiones por dicha razón. ¿Hemos de dar crédito al cien por cien de lo que nos cuentan?
Estos historiadores no son contemporáneos del emperador. Suetonio no vivió en la época de Calígula sino posteriormente, en la de Trajano y de su sucesor Adriano, próximo a los círculos de amigos de éstos, como Plinio el Joven. Su interés estaba en ganarse los favores del poder y una forma de lograrlo era ensalzar a los poderosos de su tiempo, rebajando la importancia de los de ayer, como por ejemplo Calígula.
El novelista Robert Graves tomó muchos datos del historiador citado para su obra “Yo Claudio”. Evidentemente le convenía esa versión truculenta por ser más llamativa para sus potenciales lectores.
Suetonio, en su obra Vida de los doce césares, nos cuenta algunas anécdotas terroríficas de Cayo Julio César Augusto Germánico:

"Cap XI
(En su infancia) no podia ocultar sus bajas y crueles inclinaciones, siendo uno de sus placeres más gratos presenciar torturas y el último suplicio de los condenados.
Cap XXIV
Tuvo trato carnal y continuo con todas sus hermanas, y a la mesa las hacia sentar consigo en el mismo lecho, mientras que su esposa ocupaba otro.
Cap XXVI
No mostró más respeto ni bondad con los miembros del Senado. Consintió que muchos de ellos, honrados con las primeras dignidades, corriesen a pie y con la toga junto a su carro por espacio de varias millas, y que durante sus comidas permaneciesen en pie detrás de su lecho o a sus pies con un delantal en la cintura. Hizo matar a algunos secretamente.
Cap XXVII
Como costaban muy caros los animales para el mantenimiento de las fieras destinadas a los espectáculos, designó algunos condenados para que les sirvieran de alimento (…)
Condenó a las minas, a los trabajos de los caminos y a las fieras a multitud de ciudadanos distinguidos, después de haberlos marcado con el estigma del fuego. Encerrábales también en jaulas, en las que tenían que mantenerse en postura de cuadrúpedos, o bien los hacía aserrar por la mitad del cuerpo. Y no mandaba esto siempre por causas graves; a unos, porque no habían quedado contentos con un espectáculo; a otros, porque nunca habían jurado por su genio. Obligaba a los padres a que presenciasen el suplicio de sus hijos.
Cap XXXIV
En los espectáculos de gladiadores dados por él o por otros, hacia degollar a todos los que caían, aunque fuese por casualidad." (2)

El otro historiador aludido anteriormente era Dion Casio, de familia patricia, fue senador con Cómodo, es decir perteneciente a una institución que tanto denigró y humilló Calígula y a la que apartó de la toma de decisiones. No es tampoco por tanto otro árbitro imparcial en este tema.
Dión Casio, en su obra Historia romana, también nos ofrece alguna semblanza del emperador:

"Cap IV
Se olvidó de castigar a muchos de los que eran culpables de grandes crímenes , y mató a muchos que ni siquiera habían incurrido en la sospecha de malas prácticas (...) Nadie sabía bien qué decir o cómo actuar con él.
Cap XV
A uno de los caballos, al que llamó Incitatus, solía invitar a cenar, y se le ofrecía la cebada en recipientes de oro, obligando a los demás a beber a su salud, brindando por la vida del animal y por su fortuna e incluso se comprometió a nombrarlo cónsul, una promesa que sin duda se habría realizado si hubiera vivido más tiempo. " (3)

Sólo dos fuentes historiográficas coetáneas del emperador dan cuenta de él: Filón de Alejandría, que se centra en aspectos menos anecdóticos de la época y externos a la figura de Calígula, y el cordobés Séneca, gran orador en el Senado que por su talento suscitó la animadversión del princeps, faltando poco para ser ejecutado, por lo que su objetividad también se cuestiona:

Disgustado Cayo César por la minuciosidad que afectaba en traje y peinado el hijo de Pastor, ilustre caballero romano, le hizo reducir a prisión, y rogándole el padre que perdonase a su hijo, cual si la súplica fuese sentencia de muerte, ordenó en el acto que le llevaran al suplicio. Mas para que no fuese todo inhumano en sus relaciones con el padre, le invitó a cenar aquella misma noche.”

De la ira, cap XXXIII. Libro II (4)

lunes, 23 de noviembre de 2009

Descubre el personaje 9

¿Quién es quién?
Hoy la cosa va de artistas, escritores, actores y músicos.


1
Si fuera un rey se llamaría
"Tululo III".


2
Dicen que lo confundieron con un vagabundo.



3
Falleció en 1973.



4
Partidario del arte total o síntesis
de la música, la poesía, el arte escénico...



5
Fue nombrado "Sir" por la reina de Inglaterra.



6
Su padre era policía.



7
Nació en Boston.


8
Nació en Praga.


9
¿A que se parece a otro?



10
Así no da tanto miedo.


viernes, 20 de noviembre de 2009

El final del franquismo


Imagen: Wikipedia


EL FINAL AGITADO DEL FRANQUISMO



Los últimos años de la dictadura franquista fueron extraordinariamente movidos.
Hubo una intensificación de la oposición democrática al régimen, con abundancia de protestas, huelgas y manifestaciones. También hubo un rearme de las actividades represoras, volviendo a los años más duros del franquismo.
Información y represión eran los dos pilares básicos en estos momentos para el régimen. En primer lugar hay que citar al TOP. El Tribunal de Orden Público fue un organismo judicial especial que se creó en los últimos años. Su objetivo era reprimir las actuaciones consideradas como delitos políticos. Completaban el complejo sistema de información y represión la Brigada Político Social, los servicios de inteligencia militar, la Policía Armada (los popularmente grises ) y la Guardia Civil, cuerpo que se había mostrado fiel al bando nacional durante la guerra.
Lo típico aquí eran las detenciones, los interrogatorios, las amenazas, las palizas, las torturas, las condenas y la separación del implicado de la vida pública.
Se inició la actividad terrorista de ETA, con atentados dirigidos hacia personajes del sistema. El primer atentado lo sufrió en 1968 Melitón Manzanas, jefe de la Brigada Político Social en el País Vasco, colaborador de la Gestapo durante la pasada guerra mundial, acusado por muchos de emplear la tortura en los interrogatorios.
El caso más sonado fue el asesinato de Carrero Blanco en 1973, en el atentado denominado “Operación Ogro”. Con este atentado se frustraba la posibilidad de continuidad de la dictadura.
Hubo estos años también una gran actividad del sindicato clandestino CCOO. Fue tristemente famoso el proceso 1001, en el que se juzgó a dirigentes del sindicato ante el TOP con condenas de largas penas de cárcel (los condenados fueron amnistiados tras la muerte de Franco)
1975. Franco agonizante firma penas de muerte: tres del FRAP y dos de ETA. Hubo una ola de protestas dentro y fuera de España, con condenas internacionales del régimen franquista, incluidas las peticiones de clemencia del papa Pablo VI, la del primer ministro sueco Olof Palme o la del presidente de México Luis Echevarría .Incluso se llegó a pedir la expulsión de España de la ONU. En el País Vasco se decretó una Huelga General que era seguida mayoritariamente, en muchas ciudades españolas se multiplicaban los paros y las protestas y en el mundo no cesaba el clamor contra las ejecuciones. Irregularidades, falta de garantías procesales... Los juicios sumarísimos que se hicieron a los acusados fueron denunciados por observadores que habían asistido a los mismos. Se hablaba de simulacros, de farsa siniestra, de burla a la justicia.
En su último discurso, Franco, ya enfermo, y un mes y pico antes de su fallecimiento , dijo:

"Todas las protestas habidas obedecen a una conspiración masónica-izquierdista, de la clase política, en contubernio con la subversión comunista-terrorista en lo social, que si a nosotros nos honra a ellos les envilece."

Circulaban por España diferentes hipótesis sobre cuando ocurriría la muerte del general.
Había opiniones para todos los gustos. Incluso se llegó a proponer un ejercicio de aritmética:
- Inicio de la guerra: 18 – 7 – 36
- Final de la guerra: 01 – 4 – 39
Sumamos las fechas y...
__________________________
Fecha de la muerte: 19 – 11 – 75 (Hay quien piensa que la muerte real pudo sobrevenir antes de la muerte oficial).
El 20 de noviembre, un día después de la predicción, tras una larga enfermedad, fallecía oficialmente Franco. Los allegados al general prolongaron artificialmente todo lo que pudieron la agonía del dictador por razones poco claras y para dejar todo bien controlado -"atado y bien atado"- antes de la sucesión, lo que supuso una auténtica tortura infligida paradójicamente no por sus enemigos, sino por los suyos.


miércoles, 18 de noviembre de 2009

Goya


"El sueño de la razón produce monstruos", en Wikipedia.


Francisco de Goya: España en la encrucijada



(Francisco José de Goya y Lucientes; Fuendetodos, España, 1746 - Burdeos, Francia, 1828)
Considerado el padre del arte moderno por su enorme influencia.
Afrancesado para unos, español crítico con su tiempo para otros, próximo a las ideas reformistas de la Ilustración, fue testigo excepcional de una época convulsa y violenta; también fue víctima de la incomprensión del absolutismo absurdo que triunfó en España tras la derrota napoleónica y que sepultó a nuestro país en décadas de atraso.
TIEMPOS BUENOS
Goya conoció épocas buenas cuando fue nombrado pintor oficial de Palacio con Carlos IV, disfrutando de una posición especial en la corte, siendo retratista de la familia real (La familia de Carlos IV, retrato de realismo crítico donde el pintor se permite una buena dosis de ironía). También tuvo entre sus clientes gente de la aristocracia, pintando cuadros como las famosas La maja vestida y La maja desnuda, que según dice la leyenda popular representan a la duquesa de Alba, quien mantuvo con el artista una relación especial e intensa.

La familia de Carlos IV, en Wikipedia

MALOS TIEMPOS
Pero el pintor también tuvo rachas malas. A raíz de una enfermedad, Goya se quedó totalmente sordo, lo que marcó un importante cambio de su rumbo en su producción artística. Aparecen sus primeros grabados Los caprichos, donde trata de forma satírica creencias, defectos y supersticiones de la España de su tiempo. Luego aparecen otras colecciones de grabados, los Desastres de la guerra y los Disparates , donde aparecen visiones críticas sobre los males y locuras de la humanidad.
En 1808, la invasión de España por las tropas napoleónicas, el horror de la guerra dejó una profunda huella en Goya, a la vez que colocó al pintor en una situación muy delicada dado que con José Bonaparte conservó su situación de pintor en la corte. Realizó El dos de mayo de 1808, la matanza de los mamelucos en la Puerta del sol y El tres de mayo de 1808, o los fusilamientos en la montaña de Príncipe Pío ( Museo del Prado). Plasmando el horror de la guerra y el drama de un pueblo indefenso y desarmado ante los invasores franceses.

El 3 de mayo de 1808, en Wikipedia.

En los grabados de Los desastres de la guerra (1810-1814), intentó ser objetivo plasmando la crueldad y las atrocidades cometidas por los dos bandos.
Tras el regreso de Fernando VII al trono de España, el artista cayó en desgracia.
Solo y enfermo, se retiró a su casa de la Quinta del Sordo donde su enorme imaginación, amargura y creatividad se fusionaron para dar a luz catorce pinturas murales de tonos oscuros y temas macabros, Las Pinturas negras:
Saturno devorando a su hijo , El Aquelarre, Duelo a garrotazos, La romería de san Isidro... Fueron estas pinturas, terribles y a su vez originales las que dieron a Goya el reconocimiento de su genialidad, tanto por su temática como por su técnica de pincelada suelta y amplia, precursor para algunos del expresionismo moderno o de la técnica deformadora y cruel del esperpento valleinclanesco en nuestra literatura.

Duelo a garrotazos.
¿Las dos Españas?


Viejos comiendo sopa
Fuente : las pinturas negras

Amargado por la situación política de España, con la continuación del absolutismo monárquico del rey Fernando VII , se trasladó en 1824 a Burdeos, donde vivió hasta su muerte .

¿Con qué Goya nos quedamos?
¿Con el pintor feliz de los cartones para tapices?
¿Con el Goya de la corte en tiempos de Carlos IV y los encargos de la aristocracia?
¿Con el Goya amargado, enfermo y solitario, pero auténtico de los Desastres de la guerra y las Pinturas negras?




martes, 17 de noviembre de 2009

Goya

Parece que tengo problemas con el blog.
Si logro solucionarlos y tengo un rato mañana por la mañana, volveré a publicar la entrada sobre Goya.
Permanezcan atentos a sus pantallas.
Es broma.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Descubre el personaje 8


¿Quién es quién?


1
Tenía mucho cuento.


2
Parece una reina pero no.


3
¿A quién me recuerda?

4
La nariz le delata.


5
Otros tiempos gloriosos.


6
Saben aquél que diu...




7
De Miraflores.


8
Hasta parece inofensivo.

9
Ándale, ándale...


10
Un mito para muchos.

jueves, 12 de noviembre de 2009

El motín de Esquilache


Fuente de la imagen

Durante el reinado de Carlos III se produjo este célebre motín. Corría el año 1766.

Una lectura superficial nos dice que tuvo lugar por la norma municipal que introducía cambios en la vestimenta de los españoles: supresión del chambergo o sombrero de ala ancha y de la capa larga y su sustitución por la capa corta y el sombrero de tres picos, siguiendo la moda europea, con el pretexto de evitar que embozados malhechores hicieran de las suyas en las calles al esconder armas entre sus largos ropajes.

Una lectura más profunda nos indica que existía un malestar de fondo por el hambre, las subidas de precios de productos básicos como el pan, y también por la desconfianza hacia los ministros extranjeros del rey borbón, como por ejemplo el marqués de Esquilache.

La medida en todo caso fue muy mal recibida, y eso que el ministro citado estaba interesado en modernizar la ciudad, pues fue él quien organizó la pavimentación, limpieza e iluminación de las calles de Madrid... Pero parece ser que la gente no estaba por la labor de cambiar su indumentaria.


Y estalló el motín. Miles de personas por las calles, enfrentamientos con las fuerzas del orden, pillaje...

Al final, los madrileños se conformaron con el destierro de Esquilache, mantener la vestimenta tradicional -y eso que con el tiempo se impuso la nueva indumentaria- y alguna baja en el precio de los alimentos de primera necesidad.

Y no llegó la sangre al río. El motín se quedó en eso: un simple motín, una algarada numerosa y ruidosa, pero nada más. No hubo ninguna revolución. No hubo autores intelectuales detrás que incitaran a las masas a una rebelión más profunda. No fue una revuelta de carácter político. Nadie estaba en contra del rey ni de la nobleza ni del orden establecido. Y eso que muchos privilegiados acapararon trigo y ello había encarecido los precios.


Momentos anteriores al motín. Los madrileños cambian a la fuerza su indumentaria.
Fuente:
Wikipedia

En resumen: hubo motín, pero no una revolución como la que se dará en Francia.

En la Wikipedia podemos leer: "Las turbas populares que asaltaron el Palacio de Versalles y que trajeron de vuelta a París a la familia real, rebautizados como el Panadero y la Panadera, no son muy distintos de las madrileñas de veintidós años antes, pero la gestión política y social de los acontecimientos es abismalmente diferente. Ahí hubo un asalto al poder por parte de una nueva élite dirigente con conciencia de clase: la burguesía, definida como Tercer Estado por Sieyes. En España no la había. No fue el motín de Esquilache una vacuna contra la revolución, sino una muestra evidente del atraso relativo de España."

Y esto da qué pensar.

¿Cuándo y por qué se movilizan los españoles?
¿Con qué se conforman?
¿Tenemos lo que nos merecemos?
¿Somos cómplices del atraso secular de España?

martes, 10 de noviembre de 2009

Epitafios


Imagen de Patricia, en flickr.


Ahora que ya va quedando lejos la fiesta importada de Halloween, es el momento de hablar de muertos, cementerios y lápidas.
No vamos a hablar de memoria histórica, de ejecutados en las cunetas como perros, de injusticia, de muertos de primera y muertos de segunda categoría... Eso lo dejaremos para otro día.
Mi hijo mayor me dice: "¿Por qué no haces una entrada de epitafios famosos?"
Pues eso: hoy vamos a hablar de epitafios.

"Disculpe que no me levante"
Groucho Marx
El más conocido quizás de todos los epitafios resulta ser falso, porque en la tumba de Groucho Marx en Los Angeles, no figura frase alguna; sólo su nombre, las fechas de su nacimiento y muerte (1890-1977) y una estrella de David como corresponde.

Muy poético el siguiente:

"Aquí yace alguien cuyo nombre se escribió en el agua."
John Keats
Un gran hombre de teatro:
"Aquí yace Molière el rey de los actores.
En estos momentos hace de muerto
y de verdad que lo hace bien."

El autor de “Eloísa está debajo de un almendro”, Enrique Jardiel Poncela:
“Si queréis los mayores elogios, moríos”.



Mel Blanc , el actor que le prestaba su voz a Porky, en el “chou” de Bugs Bunny- dijo lo único que podía decir:
“Eso es todo, amigos” (“That’s all folks”)

Dicen que Chaplin quiso para su tumba esta sentencia:
“La vida ha dejado de ser un chiste para mí; no le veo la gracia.”
-->
Epitafio de Miguel Mihura, escritor de comedias como “Tres sombreros de copa”:
"Ya decía yo que ese médico no valía mucho."
Frank Sinatra:

"The best is yet to come" (Lo mejor está aún por venir)

Epitafio de Séneca:
“Es más digno que los hombres aprendan a morir que a matar”.
Epitafio del Marqués de Sade:
Si no viví más, fue porque no me dio tiempo”
Miguel de Unamuno, genio y figura hasta el final:

"Sólo le pido a Dios que tenga piedad con el alma de este ateo".

A los dictadores les vendría bien poner:

“A que vuelvo”.

Sin comentarios...

Bueno, ¿quién se anima a escribir el suyo?
Como os conté en su día un servidor es partidario de la cremación, así que difícil tengo el poner un epitafio en parte alguna. A no ser que en la vasija de las cenizas ponga un letrerito con alguna frase del estilo de:

Bueno, yo he cumplido mi parte del trato con esos tres ejemplos. Mi favorito es el último, aunque tiene un pelín de mala uva.








sábado, 7 de noviembre de 2009

Nuestro modelo de sociedad


Fuente de la imagen.

¿Hacia dónde va esta sociedad podrida de consumo sin valores?

Cultura de la abundancia y del despilfarro sin control ni meta.

Donde lo importante no es "ser" sino "tener", comprar, gastar.

Porque consumir es el objetivo.

Así la máquina siempre engrasada se perpetúa.

Un círculo vicioso que no tiene salida.

Un gigantesco Kraken que nos devora y del que nos nutrimos.

Y un mensaje: no te salgas del círculo si quieres ser feliz.

Consume pero no pienses.

Tú sólo consume.

Y tira todo lo que puedas a la basura.


Cuando tengas unos minutos mira este vídeo. Es espeluznante.


Pollo a la carta.



miércoles, 4 de noviembre de 2009

El trabajo infantil en la Revolución Industrial


Fuente de la imagen


¿Qué expresan esas miradas?

Una de las miserias más grandes de la Revolución Industrial inglesa fue la referente al empleo masivo de mano de obra infantil en el proceso de producción.
Algo muy provechoso para empresarios y fabricantes porque el salario de los niños era dos o tres veces inferior al de los adultos.
Así, chicos de 10 ó 12 años, e incluso menores, eran empleados en las minas, la industria textil o la siderurgia. Su horario de trabajo, de 10 a 12 horas diarias, incluso sábados.
Esto se aceptaba como algo normal dada la mentalidad de la época y dadas las necesidades de las familias obreras.
El escritor británico Charles Dickens, en su novela "Tiempos difíciles" supo plasmar las dificultades de estos chicos explotados a los que se les arrebató la infancia en un mundo despiadado de adultos, convirtiéndose así en testigo excepcional de su tiempo.
Fuente de la imagen

Esta imagen la encontré en este blog amigo

Traigo aquí un texto que he encontrado en esta interesante dirección:
"Trabajo en el pozo de Gawber. No es muy cansado, pero trabajo sin luz y paso miedo. Voy a las cuatro y a veces a las tres y media de la mañana, y salgo a las cinco y media de la tarde. No me duermo nunca. A veces canto cuando hay luz, pero no en la oscuridad, entonces no me atrevo a cantar. No me gusta estar en el pozo. Estoy medio dormida a veces cuando voy por la mañana. Voy a escuela los domingos y aprendo a leer. (...) Me enseñan a rezar (...) He oído hablar de Jesucristo muchas veces. No sé por qué vino a la tierra y no sé por qué murió, pero sé que descansaba su cabeza sobre piedras. Prefiero, de lejos, ir a la escuela que estar en la mina."

Declaraciones de la niña Sarah Gooder, de ocho años de edad. Testimonio recogido por la Comisión Ashley para el estudio de la situación en las minas, 1842.



lunes, 2 de noviembre de 2009

Perpetrando a Zorrilla 2

¡Que Zorrilla nos perdone!
Rosa y un servidor hemos vuelto a perpetrar unos versos, esta vez sobre el afamado don Juan, ligón de tres al cuarto, reconvertido aquí en gorrón impenitente, en busca de algún incauto que pague sus tragos.


Rosa en el mismo color.
Cayetano en azul.

Don Juan Tenorio era aquél que decía...

"Yo a los tugurios subí.
Yo a las bodegas bajé.
Y en todas partes dejé...
que pagara Ramoncín."

Ramoncín tiene posibles,
por eso paga las rondas,
y hay quien busca su compaña
por no pagar ni una gorda.
Parece que uno de ellos
era este don Juan Tenorio,
que era un gorrón de cuidado,
eso es público y notorio.

Pues con galán tan mezquino
habrá que tener cuidado.
De pagar rondas ajenas
está mi barrio arruinado.

Don Juan triunfa por la estampa,
que con tal arma conquista,
pues si fuera por la bolsa,
no se comía una rosquilla.

¿No es verdad, amiga Rosa,
que este Juan conquistador
es muy bello y agraciado,
pero muy mal pagador?

Eso es verdad, Cayetano,
mas no es eso lo peor,
sino que es un botarate
y además un picaflor.
Que lo inviten al condumio
no constituye baldón,
pero engañar a las damas
no lo hace quien tiene honor.

Y en su epitafio pondrá,
y lo digo con premura:
"Aquí yace un vividor.
Gorroneó sin mesura.
Galanteó con denuedo.
De su vida hizo locura.
Reposa aquí Juan Tenorio.
Aquí yace un caradura."



Es de esperar que el señor Zorrilla nos perdone allá donde esté. Al fin y al cabo hacemos publicidad gratis de su personaje, al que no hemos tratado peor que el propio autor, que conste, que al fin y al cabo es su padre.