Un nuevo curso

Castillo de la Mota en Medina del Campo
Ladrillo en vez de piedra

Tras el paréntesis vacacional, heme aquí de nuevo.
Lo primero, saludar a los amigos blogueros e intentar ponerme más o menos al día en lo referente a visitar páginas y comentar entradas. También, responder a los comentarios dejados en mi blog.
La verdad es que este verano he estado un poco alejado de este mundillo y como habréis podido comprobar se me ha visto poco el pelo por la blogosfera en general. Necesitaba la desconexión total, dedicarme a otras cosas un poco dejadas de lado en los últimos meses, viajar, estar con la familia, descansar, reflexionar... Por eso no me he llevado el ordenador conmigo cuando estaba fuera.

Monasterio de Yuste

Buen lugar para meditar

De regreso ya a la normalidad, os quiero comentar el cambio de ritmo que va a experimentar este blog.
Veréis.
Este año se anuncia complicado, demasiadas tareas en el horizonte, con poco tiempo libre para dedicar todo el que quisiera a esta actividad (hacer entradas cada tres o cuatro días, responder a los comentarios, entrar en los blogs de los amigos, comentarles cosas... Un ritmo difícil de mantener si se encuentra uno con poco tiempo disponible). Además del blog y de mi trabajo, he de sacar tiempo para otras tareas gratas y/ o necesarias: aprender música (ya estoy en ello), hacer algo de ejercicio...
Por ello, voy a espaciar ligeramente tanto mis entradas como mis apariciones en los lugares habituales.
Por otro lado, tras más de dos años en este mundillo he ido acumulando mucho material en el archivo, entradas antiguas que conviene desempolvar, reciclar y sacarlas a la luz para que mis nuevos alumnos vean que existen y que son un material complementario adecuado para ayudar a preparar los temas de las clases de historia. Por ese motivo habrá entradas "de reciclaje", ya conocidas por mis seguidores, que no tendrán habilitada la opción de comentarios, dado que ya fueron comentadas en su día, y porque su objetivo no es otro en este caso que darlas a conocer a los nuevos alumnos.
Luego habrá otras dedicadas, como era lo habitual, a mis amigos de siempre y con la opción de comentarios abierta, pero como digo, algo más espaciadas temporalmente.
Espero que sepáis perdonar que este curso no esté tan presente en mi casa y en las vuestras como ha sido lo corriente hasta la fecha, pero si quiero tener tiempo para atender otras obligaciones y pretender que mi blog perviva y no renunciar a él ha de ser de esta manera. No conozco otra mejor.

Renovarse o morir.
Un saludo afectuoso.