- Corrupción generalizada entre la clase política.
- Los partidos mayoritarios se ponen de acuerdo en sus prebendas y obstaculizan la posibilidad de reformas a los demás grupos y formaciones.
- Asistencia sanitaria que deja mucho que desear.
- Importante intromisión de la religión católica en asuntos educativos.
- Desigualdad social creciente.
- Mucho desempleo y gente necesitada.
- Economía sumergida, dinero negro y fraude fiscal.
- Monarquía inoperante y desacreditada.
- Problemas con los nacionalistas y sus ansias de independencia.
- Se dan movimientos sociales y culturales que hablan de regenerar la vida política...
Lógicamente estamos hablando de algunos problemas de la España de la Restauración, la época de Alfonso XII, la Regente María Cristina y Alfonso XIII.
¿Qué habíais pensado?
Historias que se repiten, bien podrías haber titulado Paranormal…
ResponderEliminarUn abrazo
Esperemos que el desenlace de la situación no sea el mismo.
ResponderEliminarSaludos.
Jajjj, pues menos mal. Bsss.
ResponderEliminarJose Senovilla: sí. Ya tenemos unos cuantos de esos "para anormales". Jejeje.
ResponderEliminarFeliz domingo.
Antonio: esperemos; aunque dudo de la capacidad de algunos para evitarlo.
ResponderEliminarUn saludo.
Emejota: sí. Es un alivio pensar que otras veces hemos estado todavía peor.
ResponderEliminarUn saludo.
Madre mía, eso lo convierte en un mal endémico, y por tanto en una tarea imposible. Qué bajón!
ResponderEliminarFeliz domingo, monsieur.
Bisous
Madame: nos queda el pobre consuelo de saber que otras veces hemos estado peor.
ResponderEliminarFeliz día.
Pues me lleva a pensar, mejor dicho, a confirmar, que los tiempos son cíclicos y que volvemos a estar en el valle de las olas.
ResponderEliminarUn abrazo
Francisco: yo ya no sé si cíclico o "círquico", con tanto payaso suelto.
ResponderEliminarUn saludo.
Estaba absolutamente segura de que España va hacia atrás, que todas las conquistas de la modélica transición española se van perdiendo con la excusa de la dichosa crisis. De hecho últimamente mi frase preferida es "volvemos al caciquismo del siglo XIX". Pensé que estaba exagerando pero veo, por tu entrada, que no es así, que retrocedemos a aquella España caótica y sin solución de los gobiernos de copncentración.
ResponderEliminarUn saludo
Jeje! Muy ocurrente! Tu sarcasmo, te diré, es internacional (yo no pensé ni en los Alfonsos, ni en María Cristina, pero tampoco en lo que pensaron tus otros visitantes!)Jejej...Abrazo, Cayetano.
ResponderEliminarEsta es la historia de pegarle una patada al problema para encontrárnoslo un tiempo después, con la desgracia que supone que ni nos acordemos que esto ya nos ha ocurrido en el pasado y de cómo no reaccionamos entonces.
ResponderEliminarLa historia de España está plagada de pocos que viven a costa de muchos, digámoslo claramente.
Un saludo, amigo Cayetano, y gracias por tu finísima ironía. Me has sacado una sonrisa, pese a lo serio del asunto.
Es desmoralizante ver que estamos mas o menos como hace un siglo. Y desmoraliza mas recordar cómo se cerró esa crisis: "dictablnada" de Primo de Rivera, una República que nació muerta, guerra civil y al final una larga dictadura. Por aquellos tiempos también hubo crisis económica mundial.
ResponderEliminarOtro ejemplo parecido es el final de la República Romana que degeneró en cesarismos.
Saludos, Cayetano
Pienso que hemos avanzado poco.
ResponderEliminarUn abrazo
Que me ha hecho Ud reir..
ResponderEliminar¿y como termino ese momento histórico?
¿O todavia no han salido del mismo?
Carmen: de cabeza vamos para allá si algo no lo remedia.
ResponderEliminarUn saludo.
Patzy: es lo poco que nos queda, el sarcasmo.
ResponderEliminarUn saludo.
Anónimo Castellano: si no nos tomamos esto con un poco de humor...
ResponderEliminarUn saludo.
Carolus: siempre la maldita crisis anda detrás de todo esto.
ResponderEliminarUn saludo.
Antorelo: casi ni nos hemos movido. Es una dolencia crónica de nuestro país.
ResponderEliminarUn saludo.
Nando: parece que seguimos ahí instalados.
ResponderEliminarUn saludo.
Está claro que estás hablando de la España de la Restauración, ahora habría que añadir, Bankia, Gürtel, Noos, Rita Barberá, Camps, Pujol, Ana Mato, participaciones preferentes, evasión de divisas, desahucios, elefantes en Botswuana, crisis financiera, etc.
ResponderEliminarSalud
Francesc Cornadó
¿Males crónicos? ¿No se llama así? Parece que no aprendemos y, por supuesto, no mejoramos. Tu sentido del humor es el idóneo para estos tiempos, Cayetano. Yo había pensado como casi todos. Abrazos.
ResponderEliminarFrancesc Cornadó: cada época tiene su Semana Trágica, su perdida de Cuba, su crisis de Marruecos... Lo otro son las coincidencias.
ResponderEliminarUn saludo.
Paco: si nos quitan el humor no nos dejan casi nada.
ResponderEliminarUn saludo.
Para estos casos, el dicho: "otro vendrá que bueno te hará".
ResponderEliminarLa Fuensanta y el Antón: pues apañados estamos.
ResponderEliminarUn saludo.
Jeje. He de reconocer, Cayetano, que he picado. Pensaba realmente que estabas describiendo la España actual.
ResponderEliminarLo peor es que al ver mi error, no me he tranquilizado. Tropezamos siempre en las mismas piedras y no veo yo hoy mejores soluciones que antaño.
¡Menudo panorama!
Abrazos!
Enrique : es que en este país nuestro vamos a piñón fijo. Aprendemos poco.
ResponderEliminarUn saludo.
Que triste...Siguen siendo los mismos problemas...Nada se ha avanzado...
ResponderEliminarSaludos Cayetano
España es cíclica, todo es cíclico, hasta la tasa de paro sube y baja para luego volver a subir. Ya hay por ahí algún político de la transición, ministro de educación con Suárez que está viendo la que se avecina y proponiendo una solución "para el día antes de la inevitable revolución".
ResponderEliminarManuel: y lo que se ha avanzado en educación, en sanidad y en derechos, estos de ahora lo están desbaratando. Parece que estamos condenados a repetir una y otra vez los mismos errores.
ResponderEliminarUn saludo.
Luis: más que una España cíclica yo diría "círquica", por la de payasos que tenemos que aguantar.
ResponderEliminarUn saludo.
Pues cualquiera lo diría.
ResponderEliminarLa Historia se repite. Pero ya sabemos que el ser humano ha de tropezar siempre en la misma piedra. Lo malo es que algunos no se descalabran la cabeza.
Besos
A mi me parece que todo lo que se había conseguido lo habíamos magnificado porque la transición no fue tan modélica. Hubo mejoras en lo material, lógico, igual que en el año 75 se estaba mejor en lo material que en el 55. Pero lo importante es que jamás hubo un democracia auténtica y al final la corrupción lo inunda todo cuando no hay control, es decir, separación de poderes. Hasta un ministro se atrevió con el descaro que le caracteriza a decir que "Montesquieu ha muerto".¿Qué esperamos de esta España con esta gentuza al mando?. Lástima que no nos diéramos cuenta antes. Estos de ahora son la culminación de todos los anteriores. La solución no pasa por un cambio "sin más" de gobierno, como pensaba Alfonso XIII con sus cambios ministeriales y gobiernos de conncentración. El declive es irreversible. Ahora habrá que ver cuánto dura el enfermo terminal.
ResponderEliminarEs increíble como se repiten los hechos, como se vuelven a cometer los errores del pasado...
ResponderEliminarAquí nadie aprende. "Siempre gobiernan los mismos, solo cambia el maquillaje".
Buena entrada, hace un tiempo, escribí algo parecido.
Que nos ttenemos solución y somos incapaces de aprender de los errores pasados. No se puede pensar otra cosa. Un saludo desde mi mejana
ResponderEliminarVaya, parece que seguimos siendo el mismo perro flaco y nos siguen acudiendo las mismas pulgas. Un abrazo y feliz semana
ResponderEliminarArantza: somos así de borricos. No escarmentamos ni a base de tortas.
ResponderEliminarUn saludo.
Luis: y es que en el fondo hemos cambiado muy poco. Quitando esas dos décadas de prosperidad, volvemos a donde siempre: la España del hambre, de los señoritos y de los sinvergüenzas.
ResponderEliminarUn saludo.
Fernando: es triste pero parece que tendemos a cambiar para bien muy poco y a mantener lo malo siglo tras siglo.
ResponderEliminarUn saludo.
Felipe: una especie de sino o mal de ojo que no nos abandona.
ResponderEliminarUn saludo.
Alma de Adra: o las mismas pulgas o sus nietas, pero de la misma raza.
ResponderEliminarUn saludo.
¡Menudo nublao, amigo mío!
ResponderEliminarEs para llorar. No aprenden, no aprenden...
Rosa: con la de nubes grises y gordas que hemos tenido este año y yo me tengo que encontrar, cámara en ristre, con esta nubecilla de segunda regional al lado de casa. En fin, no había otra.
ResponderEliminarUn saludo.
Por un momento, bueno hasta finalizar la lectura, pensaba que hablabas de hoy....¡¡Y fíjate la de años que pasaron!!!
ResponderEliminarDejemos de bromear... ¿Cómo se las han apañado para mantenerse en el tiempo? ¿Acaso son una especie diferente e inmortales?
Muy buena entrada, gracias.
Detalles: la conclusión es que padecemos males endémicos. Por desgracia.
ResponderEliminarUn saludo.
Planteas dos interrogantes Cayetano
ResponderEliminar1ª las cosas al parecer no han cambiado mucho.
2ª Causas de esta carencia de evolución: Deterioro y falta control de la clase política, y la democracia , nunca ha sido real, pero ahora esta sumida en una profunda crisis.
Es realmente representativa ????
A dónde va abocado el sistema ante este panorama ????
Gracias y saludos, Cayetano
Davis Duro Trapero: ya me gustaría ser optimista y decir que de esta crisis hemos aprendido algo; pero la historia pasada y reciente lo único que nos muestra es que seguimos tropezando una y otra vez en la misma piedra.
ResponderEliminarUn saludo.
Impresionante, lo mismo que los banqueros franceses en el periodo de Luis Felipe. Todo se repite.
ResponderEliminarDapazzi: o somos cíclicos o es que no aprendemos ni a palos.
ResponderEliminarUn saludo.