Carlos II, el último de los Austrias en España
Con buen pie empezaron los Borbones su andadura por España al encontrarse con el inicio de la recuperación económica. Las reformas ilustradas que hicieron Felipe V, Fernando VI y Carlos III fueron importantes para modernizar el país, pero es justo decir que ya a finales del siglo anterior se habían empezado a notar los efectos de un cambio para bien en materia económica y demográfica.
Ya en los últimos años del reinado de "El Hechizado" habían empezado a surgir "brotes verdes", señales inequívocas que indicaban la salida de la crisis, el advenimiento de un cambio de ciclo económico.
El dicho español de "no hay mal que cien años dure" parecía finalmente cumplirse. Aunque el siglo XVII fue señalado como de decadencia a casi todos los niveles imaginables, exceptuando el cultural, con ese espléndido Siglo de Oro y sus figuras relevantes, en los últimos años de la centuria se vislumbraba la salida del oscuro túnel en el que la historia nos había relegado.
Como ha señalado Henry Kamen ( La España de Carlos II. Ed, Crítica-Grijalbo, Barcelona, 1981), en los últimos años del reinado de Carlos II comienza la estabilización de la economía sobre todo en la periferia. La población empieza a crecer. En Castilla a partir de 1680 mejoran las cosas gracias a que se retiran las epidemias y disminuye poderosamente la inflación. Catalanes y vascos inician una importante expansión comercial...
¿Fueron necesarios pues los Borbones para modernizar España?
Dejando aparte el debate sobre si es mejor o peor el modelo monárquico que el republicano -lo que sería materia de una entrada diferente, tal vez otro día-, yo soy de los que opinan modestamente que hicimos mal negocio con el cambio dinástico.
Si Carlos II hubiera tenido descendencia, de seguir viva la monarquía, nuestra historia habría sido diferente. Entre otras cosas, nos habríamos ahorrado grandes sufrimientos, enormes desencuentros y posiblemente no habríamos perdido el tren de la historia en su momento, porque habríamos evitado...
- Una guerra civil a la muerte del último de los Austrias, nada menos que la Guerra de Sucesión entre borbónicos y austracistas (" botiflers" y "aguiluchos"), con la llegada posterior del primer Borbón, el nieto de Luis XIV, Felipe de Anjou.
- Algunos choques con la España de los fueros -hoy diríamos "autonomías"-, aquellos territorios que desde antiguo venían disfrutando de un trato especial y que los Borbones eliminaron con su centralismo heredado de los franceses. Una medida que no tenía en cuenta ni la historia peculiar ni la sensibilidad de los diversos territorios que integraban la península. A mi modo de ver, un enfrentamiento más y, sobre todo, innecesario.
- Un monarca de escasa talla como estadista, Carlos IV, más aficionado a la cerámica y a los relojes que a las tareas de gobierno, y que por estar a bien con Napoleón y con el objetivo de fastidiar a los ingleses y a los portugueses, permitió la entrada en nuestro territorio de las tropas francesas (Tratado de Fontainebleau), teniendo él y su hijo que abdicar (Bayona) y dejar el país sin autoridad legal, lo que dio pie a una tremenda guerra que asoló, esquilmó y devastó España, la Guerra de la Independencia.
Y van dos guerras como dos soles.
- Un rey nefasto y cruel, que llegó a traicionar a su propio padre y que sumió a nuestro país en al atraso durante más de dos décadas, impidiendo el camino constitucional y de la modernidad política y económica, el felón de Fernando VII. Tal vez el monarca que más daño ha causado a nuestro país.
- Las Guerras Carlistas. También nos habríamos evitado estas guerras entre compatriotas por causa de la supuesta legitimidad de unos y de otros, de isabelinos y de partidarios de Carlos María Isidro, hermano del anterior rey. Casi medio siglo XIX estuvo salpicado por varios brotes de este conflicto dinástico.
Y van tres guerras como tres catedrales de las que nos podríamos haber librado.
- El espectáculo tremendo de una reina semianalfabeta que trataba a los políticos como sus sirvientes y amparaba y fomentaba la corrupción, rodeada de una camarilla clerical manipuladora, mientras daba rienda suelta a sus instintos primarios con aquellos de su agrado que se le pusieran a tiro. Me refiero, claro está, a Isabel II, la de "los tristes destinos", la que casó a la fuerza con su primo Francisco de Asís, más conocido por "Paquita". La que pasó de la popularidad por su posición a favor de los liberales a convertirse en "la deshonra de España."
Tremendo, ya digo.
Creo que no faltan razones para pensar que quizás no nos habría ido peor con los Austrias.
Sin duda, habríamos esquivado acontecimientos muy penosos.
Como el panorama caciquil y de corrupción generalizada durante la Restauración mientras España se desangraba en guerras inútiles en Cuba y Marruecos.
Y ya en la actualidad tal vez nos habríamos evitado el lamentable espectáculo que algunos miembros de la Casa Real y allegados están ofreciendo a los españoles. Un comportamiento inadecuado y censurable, poco apropiado en un momento tan delicado como el actual, marcado por la crisis económica, el desempleo y la quiebra del sistema asistencial.
Tremendo, ya digo.
Creo que no faltan razones para pensar que quizás no nos habría ido peor con los Austrias.
Sin duda, habríamos esquivado acontecimientos muy penosos.
Como el panorama caciquil y de corrupción generalizada durante la Restauración mientras España se desangraba en guerras inútiles en Cuba y Marruecos.
Y ya en la actualidad tal vez nos habríamos evitado el lamentable espectáculo que algunos miembros de la Casa Real y allegados están ofreciendo a los españoles. Un comportamiento inadecuado y censurable, poco apropiado en un momento tan delicado como el actual, marcado por la crisis económica, el desempleo y la quiebra del sistema asistencial.
Buenos días, amigo Cayetano:
ResponderEliminarSin duda es difícil saber qué hubiese pasado si los Borbones nunca hubiesen entrado en la Península Ibérica, pero debemos recordar que por Castilla tampoco estaban muy contentos con Carlos V y sus políticas fiscales, y que Felipe IV ya podría haber dejado que gobernase el hijo de la Calderona a dar lugar a lo que pasó con Carlos II.
Ójala pudiésemos volver hacia atrás y corregir todo lo mal que hemos hecho, pero prever lo que no ocurrió es algo muy complejo y que tampoco nos deja ver los problemas que hubiesen ocurrido como consecuencia del no cambio de dinastía.
Muy interesante entrada. Un saludo.
Los Borbones fueron buenos reyes hasta Carlos IV. España en 1788 era mucho más sólida y próspera que cien años antes. El problema creo yo, no estaba en la dinastía sino en la ruptura que produjeron la Revolución Francesa y Napoleón. También el planteamiento estratégico, profrancés, mantenido hasta 1808, que constituyó un grave error histórico.
ResponderEliminarSu entrada da mucho para pensar.
Mis saludos.
Es un debate complicado y apasionado este de si los Borbones mejoraron la trayectoria de los Austrias. No estoy tan de acuerdo contigo en que si hubiese continuado los Austrias nos hubieramos ahorrado sufrimientos y estariamos en la la industrialización.
ResponderEliminarCreo que el siglo XVII fue un siglo decadente, donde nuestros reyes tuvieron una línea decreciente en falta de autoridad y mal gobierno. Lo que si es cierto es que más mal que lo hizo Carlos II era difícil que lo hiciese su sucesor.
En España había demasiadas estructuras tradicionales que fueron difíciles quebrantar, y mira que los primeros Borbones lo intentaron.
En fin, un gran debate con opiniones para todos los gustos. Abrazos y buen domingo, Cayetano.
Curioso ejercicio de imaginación sobre lo que hubiera podido pasar. Lástima que pasara lo que pasó.
ResponderEliminarSaludos, Cayetano
Tal y como nos lo cuentas resulta irrefutable, más, en el fondo de los fondos no será todo cuestión de "mal nacidos", lo digo en el sentido genético de la cuestión ... además.
ResponderEliminarHuyyy qué guerrera me he debido levantar. Bss.
Desgracias los unos y los otros, de los austrias no podemos decir como nos hubieran ido las cosas -historia ficción- pero de los borbones sí sabemos el percal. Guerra tras guerra, desgracia tras desgracia. Se proclamó una primera república y se tornó a una monarquía inepta, se proclamó una segunda república y otra vez se cayó en la sinrazón y después vuelta a empezar con una monarquía corrupta e ineficiente. Un pueblo que vota y escoge políticos de mala calaña dispuestos a esquilmar y robar todo lo que tienen por delante y favorecer a los chorizos. Este pueblo nuestro parece no tener arreglo. Incultura crónica.
ResponderEliminarSalud
Francesc Cornadó
Totalmente de acuerdo con usted, don Cayetano, pero no sabemos que nos hubiera deparado el destino con los sucesores hipotéticos de Carlos II. Y si José II de Austria no hubiese muerto prematuramente y el archiduque hubiese reinado en las Españas, a su muerte, y dejando por heredera a María Teresa, también me pregunto qué hubiese pasado...
ResponderEliminarEs muy bonito reescribir la historia.
Saludos, y lo dicho, me quedo con los Habsburgo.
Anónimo Castellano: Juan José de Austria al menos no estaba contaminado por la consanguinidad. Lo malo es que era bastardo y eso era complicado para acceder al trono.
ResponderEliminarUn saludo.
Retablo: tal vez; pero especímenes como Fernando VII y su hija Isabelona hicieron mucho daño al país.
ResponderEliminarUn saludo.
Paco: está claro que predecir el futuro es difícil; pero peor que lo hicieron "el felón" y su hija... casi imposible repetirlo.
ResponderEliminarUn saludo.
Carolus: me encantan estos juegos de historia alternativa. A nivel de clase da mucho juego para que los alumnos se impliquen.
ResponderEliminarUn saludo.
Emejota: algunos mal nacidos a pesar de su alta alcurnia.
ResponderEliminarUn saludo.
Francesc: mucha ignorancia en efecto detrás de todas estas calamidades nacionales.
ResponderEliminarUn saludo.
Dissortat: es que de Almansa para allá, ni valencianos, ni aragoneses ni catalanes quieren oír hablar de los borbones. No me extraña.
ResponderEliminarUn saludo.
Los Borbones tampoco es que sean santos de mi devoción, pero para ser justos hay que suponer que con los Austrias España también habría tenido luchas dinásticas, conflictos civiles entre los distintos territorios de la Corona, guerras con el resto de potencias europeas y costosas aventuras coloniales. De hecho en el tiempo que reinaron los Austrias hubo todo eso, además de algún rey inútil.
ResponderEliminarUn saludo.
Obvio que las causas son mas profundas, pero la monarquia española perdio , a por suerte para nosotros, las colonias americanas mas importantes,como los Virreinatos del Perú, de La Plata y Nueva Granada, hasta terminar con la perdida del Virreinato de la Nueva España.
ResponderEliminarPerdieron en diez años los territorios de Mexico y toda la america del sur hispano parlante
Luego , con los años , ni siquiera pudieron .como los ingleses, mantener una comunidad de naciones con ligazones un tanto formales como lo es la Commowhelt o como se escriba
Pero de qué modo se puede saber cómo habría sido la descendencia de Carlos II, y en qué no les habría metido? Solo podemos analizar lo que hay, pero no lo que pudo haber habido y no hubo. Vaya usted a saber si no hubiera sido salir de la sartén para caer en las brasas, y en qué otras guerras se hubiera metido, que nunca faltaban.
ResponderEliminarImagínese usted un descendiente con los genes degenerados de Carlos II. No sé a usted, pero a mí me da escalofríos pensarlo.
Feliz tarde de domingo
Bisous
Nonsei: tal vez, pero lo que tuvimos con Fernandito e Isabelita fue morrocotudo.
ResponderEliminarUn saludo.
Nando: en eso hemos sido todavía "más capullos" que los ingleses.
ResponderEliminarUn saludo.
Madame: peor que Carlos II ya era difícil. Éste nació de las "zurraspas" del rijoso de su padre. Y está claro que lo demás son tan sólo conjeturas.
ResponderEliminarUn saludo.
Cayetano a mi nunca me gustaron los Bombones, engordan mucho y producen saciedad, yo estoy saturado de ellos, espero llego algo mas liviano y con algo mas de calidad, pues estos las mezclas y los componentes los tienen viciados y la verdad es que ya no son lo que eran...esperemos cambiar pronto de menú...
ResponderEliminarUn abrazo....
Pedro H.R.: con los reyes pasa como con las especies. El que no se adapta a los nuevos tiempos no sobrevive. Veremos.
ResponderEliminarUn saludo.
Por mucho que imaginemos o que debatamos sobre lo que pudo haber sido y no fué, lo cierto es que la Historia no puede ser cambiada, tan sólo observada y analizada para tal vez, no volver a cometer los mismos errores.
ResponderEliminarSaludos Cayetano
¡Cualquiera sabe, Cayetano! Tendríamos que volver atrás para comprobarlo.
ResponderEliminarUn abrazo
Es imposible saber qué hubiera pasado, desde luego. Comparto contigo la idea de que al menos unos cuantos de los males presentes siguen activos hoy. Aquí en Valencia se dice "Cuando el mal viene de Almansa, a todos alcanza". Se refiere a que la pérdida de la batalla de Almansa por las tropas del de Austria y el consiguiente triunfo del Borbón, terminaron con el decreto de nueva planta por el que se suprimieron los fueros de Valencia, aunque la nobleza y la alta burguesía habían solicitado al rey que no lo hiciera. Así que no se libró nadie. Ese tema aún escuece y seguirá escociendo... Un abrazo muy fuerte.
ResponderEliminarAmbar: quiero pensar que no pudo ser peor de lo que fue. Tipos como Fernando VII no se dan todos los días.
ResponderEliminarUn saludo.
Antorelo: pues mejor nos quedamos donde estamos, no vaya a ser que la liemos.
ResponderEliminarUn saludo.
Isabel: ya le dije a Dissortat que de Almansa para allá hizo pocos amigos el borbón. En Xátiva hasta le colgaron el retrato cabeza abajo.
ResponderEliminarUn saludo.
Querido Cayetano, difícil experimento el de la Historia-ficción, pero tienes razón, un magnífico ejercicio para implicar al alumnado.
ResponderEliminarMil bicos.
profedegriego: es un juego que me gusta ponerlo en práctica de vez en cuando, sobre todo por motivos didáctcos.
ResponderEliminarUn saludo.
Todos tuvieron sus luces y sus sombras. Difícil saber que habría pasado. Es difícil poder imaginar lo que habría pasado pues al cambiar la primera ficha ya se alteran todas las fichas de todas las monarquías europeas con lo cual el escenario también habría sido diferente.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
Hum...No sé, seguro que hubiéramos encontrado otros motivos para pelearnos, pero sí, a Fernando VII y la Isabelona nos los habríamos ahorrado... Yo creo que ya peor que Fernando no puede haber...
ResponderEliminarUn saludo
Hace unos meses recuerdo una entrada sobre historia ficción del siglo XX. Ya resusltaba difícil especular para un corto espacio de tiempo entonces, cuanto más para tres siglos; aun así no sé si hubiéramos tenido mejor destino. Los Austrias que permitían los fueros utilizaron para la unidad de España más que la política, la unidad religiosa, con instrumentos, relativamente independientes de Roma, como la inquisición. Los Borbones, racionalistas, entralista, más rebeldes a la Iglesia -asta cierto punto, claro-, pero de modo apreciable, prescindieron de la religión y usaron y abusaron del absolutismo. Quiénes nos hubieran traído mejores resultados es difícil saberlo. Con paréntesis muy breves, parte del siglo XVIII y XIX fueron malos de solemnidad.
ResponderEliminarUn saludo.
Espero amigo Cayetano que no me tomes por irrespetuoso. Dice el chiste: "Pablo se casó en Segovia siendo tuerto y jorobado, qué tal sería la novia que fue Pablo el engañado."
ResponderEliminarUn abrazo
Me encanta tu capacidad de síntesis, Cayetano.
ResponderEliminarMenudo repaso a casi dos siglos de borbones.
Desde luego no sé si nos hubiera ido mejor con más Austrias o con Repúblicas pero, como bien dices, casi seguro que no nos hubiese ido peor.
Estamos "apañaos" con esta monarquía.
Abrazos!!
Los Borbones andan muy desacreditados en España.
ResponderEliminar¡En Argentina los colores de nuestra bandera fueron copiados de los colores borbónicos por nuestro querido Gra. Manuel Belgrano allá cuando se independizó de España... parece que no tanto!
Saludos cordiales.
Lo que es necesario recordar a modo histórico es que los fascistas nacen al morir las monarquías y sobre todo después de la Revolución Francesa y eso es de estudio social...
ResponderEliminarUn abrazo
elpresley: es un simple ejercicio que uso a veces en el aula, cuando se puede y el nivel lo permite.
ResponderEliminarUn saludo.
Alma: eso creo yo. Un señor impresentable.
ResponderEliminarUn saludo.
DTL: todo queda en la pura conjetura.
ResponderEliminarUn saludo.
Francisco: muy bueno. O sea que, según tú: Virgencita, que me quede como estoy.
ResponderEliminarUn saludo.
Enrique: nunca lo sabremos. Quedará en el ámbito de la especulación histórica.
ResponderEliminarUn saludo.
Senovilla: según tú, el fascismo nace cuando desaparece la monarquía y citas como ejemplo a la Revolución Francesa. O sea que los republicanos debemos ser fascistas y no nos habíamos enterado.
ResponderEliminarUn saludo.
Marta: sorpresas que da la vida. Aun así, aquí hay mucha gente afín a los borbones. No todos piensan igual.
ResponderEliminarUn saludo.
Me temo que por mucho que hibieran seguido los Austrias en el trono otros males nos hubieran sobrevenido. España siempre está en crisis. Lo que más me llama la atención haciendo una reflezzión sobre los Borbones es que han sido expulsados varias veces del trono, unas por voluntad de sus propios súbditos y otras por elementos exteriores. Primero le tocó el turno a Carlos IV o a Fernando VII con aquella pantomima que montaron para poner en bandeja la corona a Pepe Botella, en 1868 Isabel II hizo las maletas en pro de la modernización política del país y por fin Alfonso XIII volvió a sufrir el destino de su abuela por voluntad de las urnas. Los Austrias no sufrieron tales destinos.
ResponderEliminarUn saludo
Carmen: será que los súbditos se cansaron de serlo y empezaron a tomar conciencia de ciudadanos. Y por ello se atrevieron a más. Lo otro es un mero ejercicio de historia alternativo al estilo de "que hubiera pasado si..."
ResponderEliminarUn saludo.
Hola Cayetano:
ResponderEliminarEs posible que fuese mejor con los Austrias, pero quizás hubiese habido errores similares. Sin embargo lo pasado está y habría que justamente enmendar los errores propios, para forjar un mejor futuro, aunque impresionan que no están por la labor.
Saludos
Manuel: nunca sabremos si los Austrias serían peores de haber seguido. Lo que sí sabemos es de las fechorías y burradas de algunos borbones, no de todos.
ResponderEliminarYo, como buen republicano, prefiero a ninguno.
Muy interesante este "¿Y si...?"
ResponderEliminarLo que está claro es que peor que con el afamado Fernando VII no es posible que nos hubiera ido. De todas maneras, veo difícil que las zurrapas espúreas (Eslava Galán dixit) de Carlos II hubieran podido germinar sin recurrir a la inseminación artificial.
Primogénito: así andamos los de la piel de toro, entre felonías y zurraspas.
ResponderEliminarMe llena de orgullo y satisfacción tu comentario.
besos.
La pregunta más bien sería si son necesarios los Borbones hoy día, pero bueno, como dices que no es el día de debatir eso, lo dejo pasar.
ResponderEliminarNo se sabe que hubiera pasado, sólo son conjeturas. Los Habsburgo tendieron a defender a ultranza el régimen absolutista, y probablemente de haber seguido gobernando aquí, España se habría hallado sumida plenamente en las dos Guerras Mundiales, que no es poco.
Interesante entrada, ¡un saludo!
Pedro Manuel: los Austrias se habrían tenido que adaptar a los nuevos tiempos, como hicieron los Borbones, si no habrían desaparecido como en su día lo hicieron los dinosaurios.
ResponderEliminarUn saludo.
Cayetano, lo que planteas sería un buen ejercicio ucrónico. ¿Qué hubiera sido de España sin el cambio dinástico?
ResponderEliminarSinceramente, creo que cada cosa tiene su tiempo de vida (las dinastías también) y si los Austrias ya estaban debilitados (debilidad materializada físicamente en el propio Carlos II), tocaba traer savia nueva.
Ocurrió lo mismo en cierto modo con el paganismo: tocaba cederle el testigo al cristianismo.
Un saludo.
Menudo debate has planteado, si Austrias o Borbones. Lo cierto es que si Carlos II hubiera tenido descendencia nos habríamos evitado una guerra de sucesión que tanto daño nos hizo y que aún hoy tenemos secuelas.
ResponderEliminarSi es cierto que los Austrias eran menos centralistas, pero los primeros borbones fueron buenos gobernates.
Ahora la monarquía está en entredicho por sus propios errores y por falta de adaptación a la realidad actual, o se recicla pronto o habrá debate sobre la necesidad de la monarquía, y me temo que tiene las de perder.
Un abrazo.
No amigo Cayetano no quiero decir eso, pero los origenes del fascimos llegan como consecuencia de…que eso no quiere decir que los todos republicanos sean fascistas.
ResponderEliminarUn abrazo
Lejos del conocimiento que tenéis vosotros de vuestra propia historia, y leyéndote con ojos foráneos, para eludir el caso particular de los "Austrias y Borbones" que no es materia que domine, si pretendiera, por ejemplo, generalizar y transpolar al presente este juego de los supuestos que planteas sobre "qué hubiera pasado si..." haciendo referencia a la posesión del poder en manos quienes tienen el dominio de los destinos de los pueblos, pienso que las conclusiones a las que podríamos arribar, distarían mucho de lo que en verdad hubiera pasado si la historia hubiera tenido otro rumbo. Pertenezco al grupo de los que creen que el poder no cambia a las personas, sino que las muestra tal cual son en realidad y, contra la hipocresía del poderoso, no hay suposiciones que valgan. Con perdón de los revisioinistas! Saludos, Cayetano.
ResponderEliminarAllegra: en efecto, se trataba de un ejercicio de ucronía histórica al que sea aficionado por razones didácticas más que nada.
ResponderEliminarUn saludo.
Valverde de Lucerna: así es. Si esta monarquía quiere perdurar ha de barrer muchas cosas.
ResponderEliminarUn saludo.
Senovilla: me imaginaba que no querías decir eso. En todo caso, es un tema muy largo de debatir. Entre otras cosas, porque la caída de la monarquía en Francia no vino acompañada de ningún fascismo, sino de la República y a veces es la propia monarquía la que trae ese fascismo: Miguel Primo de Rivera vino de la mano de Alfonso XIII y Mussolini con la bendición de Víctor Manuel III y del propio Papa Pio XI.
ResponderEliminarAsí que es más bien difícil hacer una generalización sobre ese tema.
Un saludo.
Patzy: así es. La gente ya viene buena o mala de "fábrica". Si el tirano no se muestra antes es por una pura cuestión de máscaras.
ResponderEliminarUn saludo.
Yo tambien pienso que hicimos mal negocio con el cambio dinástico.
ResponderEliminarsaludos.
Dapazzi: y todo por culpa de los matrimonios consanguíneos.
ResponderEliminarUn saludo.
Tu lo Has dicho Cayetano,la guinda la están poniendo precisamente ahora,en situación tan delicada como la que estamos pasando, !!ellos son los que con sus comportamientos están perjudicando gravemente a la marca España". Siempre han sido un desastre....
ResponderEliminarComo aficionado a la historia ahora que he visto tu instructivo y ameno blog de divulgación de historia,me voy a pasar por aquí con frecuencia.
Muchas gracias y saludos Cayetano
David: bienvenido a esta humilde tinaja.
ResponderEliminarUn saludo.