IDI AMÍN DADÁ
Idi Amín Dadá, presidente de Uganda desde 1971, fallecido en 2003. Fue militar bajo las órdenes del ejército británico. Tras la independencia de Inglaterra en 1962, fue nombrado jefe supremo de las Fuerzas Armadas. Dirigió un golpe de Estado contra el nuevo Presidente: Milton Obote. Acto seguido se nombró a sí mismo Presidente y se autocondecoró.
Al principio fue bien visto por Rusia y los países árabes por aparecer como izquierdista, enemigo de Israel, de los EEUU y del occidente cristiano. Más tarde todos descubrieron que se trataba de un ser sanguinario y de poco fiar.
Polígamo, boxeador y buen cocinero, practicaba el deporte del canibalismo. Se decía admirador de Hitler. Un payaso, pero también un monstruo extravagante. Dicen que se comía las vísceras de sus enemigos.
Algunas barbaridades que hizo:
- Humillación de la población residual blanca: debían pagar un impuesto especial por ser blancos, arrodillarse ante el dictador, jurarle lealtad incondicional, llevarlo a hombros.
- Limpieza étnica en el país: expulsión de miles de asiáticos del país, de la India principalmente, tras recibir durante un sueño un mensaje de Dios.
- Declararse a sí mismo Presidente vitalicio, con un título que decía ”Amo de todas las Bestias de la Tierra y peces del Mar, Conquistador del Imperio Británico en África en general y Uganda en particular”.
- Ejecuciones masivas dentro de su propio ejército y entre la población civil.: 300.000 personas fueron asesinadas. Fuera de su país era conocido como “el carnicero de Kampala”.
- Excéntrico, sanguinario y terrible, llegó a ordenar la transmisión en directo por televisión de la ejecución de sus enemigos. Les obligaba a vestir de blanco para que, al decapitarles, se viera mejor la sangre.
- Una de sus esposas fue repudiada y poco después encontrada muerta y descuartizada dentro de un coche. A otra de sus esposas le fracturó la mandíbula de una paliza.
- Cualquiera podía ser detenido arbitrariamente y ejecutado en el acto, si ese era el capricho del dictador. A muchos los arrojaba a los cocodrilos.
- Cuentan que devoraba a sus enemigos, incluso que una vez se comió los genitales de una joven que lo rechazó. En algunas tribus se cree que comiendo parte del cuerpo de un enemigo se ahuyentan los malos espíritus, por eso a alguno de los que mandó matar les faltaba el hígado.
- Coleccionaba las cabezas de los ejecutados, y las guardaba en un refrigerador.
- Invadió Tanzania y fue derrotado. Ese fue su final como dictador. Tuvo que marchar al exilio a Libia y más tarde a Arabia Saudí, llevándose todo el dinero que pudo, regalándose una vida disipada hasta su fallecimiento.
La indiferencia, permisividad o pasividad de la comunidad internacional permitíó que este hombre viviera sus últimos años a todo lujo y muriera en su cama sin ser juzgado por las barbaridades que cometió.
Tu último párrafo es contundente, nada hacemos con la intolerancia e impotencia que nos provocan estos personajes si no somos capaces de hacernos cargo de la parte que nos toca. Hay muchos de ellos todavía, algunos bien posicionados y otros en vertiginoso ascenso... ¿seguiremos anestesiados pensando que no nos compete o que nada podemos hacer? Esta pequeña denuncia tuya en un medio para pocos pero no menos poderoso me llena esperanza, me hace sentir que SÍ... que se puede!
ResponderEliminarUn abrazo.
Son personajillos detestables, dictadorzuelos muchas veces apoyados por intereses inconfesables de terceros países que se benefician de alguna forma de su política.
ResponderEliminarCreo que el fenómeno va a menos, afortunadamente. La guerra fría ya terminó y esta gentuza ya no es tan necesaria como antes. La gente se va concienciando también poco a poco... Esperemos que así sea.
Gracias por el comentario.
Un abrazo.
Madre del alma, este sí que estaba mal de la olla! Pero como puede alguien asi hacerse con el poder? Como es posible que fuera bien visto por nadie, siquiera al principio? Ya tenia que notarsele que era peor que Caligula!
ResponderEliminarComo es posible que muriera tranquilamente en su cama??
Monsieur, cuando veo cosas como estas pienso que nunca llegare a entender el mundo.
Feliz tarde de domingo
Bisous
Un dictador, aunque sea caníbal como éste, siempre viene bien a algún país que se beneficie de sus materias primas.
ResponderEliminarUna vergüenza.
Feliz tarde para ti también, madame.
No sé qué es mayor, el espanto o la vergüenza.
ResponderEliminarUn salvaje.
ResponderEliminarCreo que fue uno de los primeros personajes que me asombraron por su crueldad. El resto eran ya historia pasada. Sin embargo, las atrocidades que contaban de este asesino eran en tiempo real. Recuerdo haber pensado lo que tú comentas: ¿por qué permiten esas atrocidades el resto de países? Y eso que no sabíamos más que una parte de sus barbaridades.
Confiemos que nunca existan más elementos como Amín Dadá en el mundo. Por lo menos con tanto poder.
Buenas noches, Cayetano.
Un abrazo.
Algo había oído hablar del personaje, pero no con tanto nivel de detalle... espeluznante este Calígula africano...
ResponderEliminarCreo que ambas cosas, Teacher.
ResponderEliminarGracias por tu opinión.
Un saludo.
Está bien eso, José Luis, de "Calígula africano". Tiene bastantes similitudes.
ResponderEliminarUn saludo.
Como bien dices, Enrique, un "salvaje", en el peor sentido del término: que comete salvajismo. No que sea "el buen salvaje" de Rousseau.
ResponderEliminarSaludos.
La película "El última rey de Escocia"
ResponderEliminarNarra perfectamente la trayectoria y personalidad de este personaje impresentable, muy recomendable. Saludos
No he visto la película pero me han dicho que es tremenda.
ResponderEliminarGracias por tu comentario, Javier.
Un producto del mal proceso de descolonzación del África británica a incios de los sesenta. En fin, lo bueno es que recuerdo aquél año 79 tan pródigo en caídas se esos malvados: Bokassa, Idi Amín, Somoza, Macías el de Gunea Ecuatorial (y ese pollo fue error español...y el pájaro que está ahora, su sobrino Obiang).
ResponderEliminarSaludos.
Así es, Juan. La descolonización se hizo fatal. Y así salió la cosa.
ResponderEliminarUn saludo.
Sería bueno no conocer tipos de esa especie.
ResponderEliminarPero los hay, y desde luego seguirá habiendo. Y la gente seguirá con la cabeza gacha, unos por miedo otros porque les resbala.
Besos, Cayetano
Marionetas en manos de los verdaderos propietarios del mundo. El terror como arma para que no se mueva nadie. Y la tiranía como sistema de gobierno.
EliminarUn abrazo, Arantza.