Más acorde con los nuevos tiempos de libertad que se vivían. Más irreverente y cáustica que ninguna. Una de sus intenciones claras era provocar. Por supuesto no dejaba títere con cabeza ni estamento social que no tocara: los políticos, las instituciones, la Iglesia… “Revista satírica y neurasténica”. Su estilo era duro, directo, temerario, descarado y hasta gamberro, como correspondía a una publicación que se desenvolvía en una democracia recién estrenada y de la que se esperaba más de lo que daba en un principio.
Más ácrata que los propios anarquistas, sus redactores popularizaron el lema: “Ni Dios, ni amo, ni CNT.” Con ello indicaban que no “se casaban con nadie” y que su independencia estaba fuera de toda sospecha.
En 1977 fue víctima de un atentado terrorista por parte de la organización de extrema derecha la Triple A (Alianza Apostólica Anticomunista), un paquete bomba en la redacción que acabó con la vida del conserje y provocó más de una docena de heridos.
Tiempos bárbaros aquellos en los que los fascistas no aceptaban el cambio hacia la democracia, protagonizando de vez en cuando actuaciones como esta o como la que contaba en otra entrada, la que sufrió La Vaquería en Madrid.
Grandes figuras del cómic y de la ilustración pasaron por ella como Carlos Giménez (el de los niños orejones de posguerra), Manolo Vázquez (el de Anacleto, las hermanas Gilda y la familia Cebolleta), Manel, Óscar, Ventura & Nieto, Já, Ivá…
Aunque su calidad y acabado técnico era inferior a la de otras publicaciones, su estilo agresivo, rebelde y hasta valiente al atacar los valores establecidos la situó en un lugar destacado entre las demás. Ello le supuso el ser secuestrada y suspendida varias veces. En 1987 acabó su carrera de muerte natural. Lo que no consiguió la bomba terrorista lo logró el hartazgo de sus lectores, cada vez más reducidos.
Más ácrata que los propios anarquistas, sus redactores popularizaron el lema: “Ni Dios, ni amo, ni CNT.” Con ello indicaban que no “se casaban con nadie” y que su independencia estaba fuera de toda sospecha.
En 1977 fue víctima de un atentado terrorista por parte de la organización de extrema derecha la Triple A (Alianza Apostólica Anticomunista), un paquete bomba en la redacción que acabó con la vida del conserje y provocó más de una docena de heridos.
Tiempos bárbaros aquellos en los que los fascistas no aceptaban el cambio hacia la democracia, protagonizando de vez en cuando actuaciones como esta o como la que contaba en otra entrada, la que sufrió La Vaquería en Madrid.
Grandes figuras del cómic y de la ilustración pasaron por ella como Carlos Giménez (el de los niños orejones de posguerra), Manolo Vázquez (el de Anacleto, las hermanas Gilda y la familia Cebolleta), Manel, Óscar, Ventura & Nieto, Já, Ivá…
Aunque su calidad y acabado técnico era inferior a la de otras publicaciones, su estilo agresivo, rebelde y hasta valiente al atacar los valores establecidos la situó en un lugar destacado entre las demás. Ello le supuso el ser secuestrada y suspendida varias veces. En 1987 acabó su carrera de muerte natural. Lo que no consiguió la bomba terrorista lo logró el hartazgo de sus lectores, cada vez más reducidos.
¿Será el sino de los ácratas? ¿Se necesita esta actitud cambiar de "acritud"? En el fondo... abundando en la misma historia.... el mismo perro con distinto collar. Beso.
ResponderEliminarEmejota: otros tiempos, otras formas de ver la vida, la política...
ResponderEliminarUn saludo.
Creo que esta revista no llegó nunca a conquistar al público en general, de hay que acabara en "muerte natural" como bien dices.
ResponderEliminarFrancisco: había dos o tres secciones que me gustaban, el resto bastante menos, incluso había alguna parte que dejaba mucho que desear. Muerte natural.
ResponderEliminarUn saludo.
Qué tiempos aquellos. Los recuerdo entre mis 13 a 15 años, es decir entre 1973 y 1975, la última época del viejo del Ferrol. Yo aún estaba con tintines y acabando mortadelos. Aún lo veía indirectamente por mi hermano mayor que sí era de la generación Progre. Recuerdo que el Hermano Lobo ya lo leía, pero de El Papus lo veíoa en el anuncioi de la tele del entonces famoso argentino Joe Rígoli, el que hacía de Felipito Tacatún y su famoso Yo...sigoooo, que lo anunciaba. Recuerdo el atentado leyendolo en Interviú aquel 77, cuando yo ya tenía 17 años y estaba ys tomando conciuencia política e i9niciaba mis estudios de Historia en la Comlu, en Filosofía B, edifico que imagino estudiarías tú.
ResponderEliminarSaludos y feliz fin de curso.
Esta la tengo muy reciente en mis recuerdos, nada más comenzar a leerte me han llegado imágenes a la cabeza.
ResponderEliminarUn abrazo.
Alguien tan bestia como Já, no dejaría títere con cabeza, al igual que la crítica inocente y dura de Carlos Jimenez con su Paracuellos. Lo penoso fueron los atentados, pero en esta España nuestra, nos sobra y nos falta por todos lo lados...
ResponderEliminarUn abrazo, Cayetano¡¡¡
La recuerdo, mucha ironía e irreverente. Había secciones muy logradas y otras no tanto.
ResponderEliminarUn saludo.
Juan: tiempos aquellos de cambio, sustos y esperanzas. A ti te pilló un poco antes que a mí, pero ya tenías edad suficiente para darte cuenta del panorama.
ResponderEliminarUn saludo.
Senovilla: espero que esas imágenes no te quiten el sueño, porque algunas se las traían.
ResponderEliminarUn saludo.
Javier. El gran Carlitos Giménez, un fuera de serie, dibujante y guionista.
ResponderEliminarUn saludo.
Valverde de Lucerna: a mí también me pasaba. Haía cosas que me gustaban y otras que no.
ResponderEliminarUn saludo.
Creo que no llegué a ver ningún ejemplar. Desde luego no llego a ser lo popular que las de anteriores entradas. Un saludo.
ResponderEliminarDesde la terraza: en efecto, no fue tan popular ni de tanta calidad como La Codorniz o Hermano Lobo.
ResponderEliminarUn saludo.
Yo no conocía esta revista, que sí me ha recordado, al leer tu entrada, a los elogios que da mi padre a La Codorniz. A Manolo Vázquez sí le conozco, pues de pequeña mis padre me daban muchos tebeos de sus personajes.
ResponderEliminarEs una lástima que hoy no tengamos una revista de este estilo, irónica, ácida y tan directa... No sé si habría suficiente público preparado.
Un saludo.
Negrevernis: la heredera natural de El Papus y de mayor parecido hoy sería El Jueves, con esas portadas con el Príncipe y Leticia en plan indecoroso.
ResponderEliminarUn saludo.
No recordaba el nombre, pero cuando contó usted lo del atentado ya me di cuenta de qué revista era.
ResponderEliminarAl final, verdaderamente, no son esas cosas las que logran terminar con una publicación, sino todo lo contrario. Solamente el lector tiene la palabra en eso.
Feliz tarde
Bisous
De esta publicación no me sonabva ni el nombre. De todos modos tuvo corta vida por lo que veo. Se hicieron el harakiri, vamos. Para ellos er amejor no tener pelos en la lengua, ni en la máquina de escribir, ni en la tinta o en la mina del lapicero.
ResponderEliminarSaludos
Nuestro favorito es Manuel Vázquez, que en el Papus usaba el pseudónimo Sappo. Anacleto estaba bien, pero lo que hizo en esta época no tiene comparación.
ResponderEliminarMadame: simplemente la gente se cansó de leer siempre lo mismo.
ResponderEliminarUn saludo.
Carmen: no tuvo la fama ni el prestigio de otras publicaciones anteriores como La Codorniz o Hermano Lobo.
ResponderEliminarUn saludo.
La Fuensanta y el Antón: muy diferente su trabajo aquí al que hacía en publicaciones infantiles.
ResponderEliminarPor cierto, ¿habéis quitado la opción de comentarios en el blog?
Un saludo.
La revista me sonaba, lo que no sabía era lo del atentado. Buscaré información del grupo apostólico ese a ver si perpetramos un post jejeje.
ResponderEliminarUn saludo.
Kassiopea: la Triple A creo que era un grupo fascista no español, creo que era argentino.
ResponderEliminarUn saludo.
Hemos desactivado la opición, y quizá siga así todo el verano, porque tendremos menos tiempo para dedicarlo al blog.
ResponderEliminarUn saludo.
No recordaba esa publicación. Gracias, tus entradas son valiosas para mí que por diferentes motivos hay temas que se han escapado de mi memoria.
ResponderEliminarUn beso
Pues mira, yo esta ni siquiera la conocía, osea que te lo agradezco doblemente. Si que me acuerdo de las hermanas Gilda por los TBO´s y de Ivá por el Jueves, claro , pero la revista no la conocía.
ResponderEliminarLa última viñeta de Forges me ha emocionado.
Un abrazo
No conocía la publicación Cayetano. De todas formas a traves del humor era mucho más fácil la critica directa, como hizo esta revista.
ResponderEliminarFalta que hace una de este estilo en mi natal Venezuela...
Saludos
No la leí nunca, Cayetano, pero recuerdo los kioskos del pueblo con la revista, junto a otras más prohibidas para nosotros, como lib o penthouse; también tuvo algún secuestro, creo recordar: En fin, esta ya gozó de mayor libertad y menos censuras, pero era una revista provocativa y mordaz, y el país lo necesitaba. Un abrazo.
ResponderEliminarLa Fuensanta y el Antón: el maldito tiempo nos limita mucho. A veces no podemos dedicar más horas a lo que hacemos.
ResponderEliminarUN SALUDO.
Arantza: es normal que los más jóvenes no conozcáis esta publicación.
ResponderEliminarUn saludo.
Alma: una revista menos conocida, pero no ocurre lo mismo con sus dibujantes.
ResponderEliminarUn saludo.
Manuel: seguro que por allí debe haber algo también. Los humoristas no son una raza en extinción, afortunadamente.
ResponderEliminarUn saludo.
Paco: a los más jóvenes de entonces la revista os pasó un tanto desapercibida, por su carga crítica y mordaz. No así con otras, como esas que citas, Lib o Penthouse, más ecordes visualmente con el despertar de la pubertad. Jejeje.
ResponderEliminarUn saludo.
Nunca leí el Papus...¡Qué vamos a hacer!
ResponderEliminarHe leido tus últimas entradas, pero aunque siempre te he dicho algunas palabras, no lo ha permitido el señor Blogger.
Hoy me ha ayudado una amiga bloguera y lo intento de nuevo, espero que esté arreglado.
Un abrazo desde mi Librillo.
Rosario: no sé qué demonios pasa con los comentarios. Una pregunta: ¿tu navegador es Internet Explorer? Creo que da problemas. Los que menos parecen ser: Firefox y Chrome.
ResponderEliminarUn saludo.
Veo que eras asiduo de este tipo de publicaciones... en esta época este tipo de revistas tenían su mérito y, como tú dices, no se casaban con nadie, cuestión harto difícil hoy en día porque todo medio tiene una línea editorial que paga y que hay que seguir.
ResponderEliminarUn abrazo
Javier: mi preferida era Hermano Lobo, esta del Papus era más "neurasténica".
ResponderEliminarUn saludo.
Revista anarquista en contra de los propios anarquistas organizados de la CNT que buscan un antisistemismo organizado y jerarquizado. Algo rebelde a lo 15-M (salvando las diferecnia del período histórico) aunque dejemos este movimiento de lado cada vez más radicalizado y dado a la violencia, no sé en qué ha quedado aquello de 15 mayo cuando varios jóvenes nos juntamos en SOL...ahora sólo veo (no generalicemos aún así) cosas que deslegitiman...
ResponderEliminar...un país, el nuestro, cada vez más crispado y radicalizado. Tengo en mi cabeza un pensamiento que no voy a difundir sobre el tema...pero lo único que puedo decir es que estamos muy muy mal, con una tensión creciente, un gobierno desgobernado, unas instituciones quebradas y en quiebra, unos políticos corruptos, una economía destruída, una paro escandaloso, un desprestigio digno del 1898...y lo pero, lo más grave, una generación de jóvenes arruinada social y económicamente, una generación sin futuro, una generación de jóvenes que vivirá peor que sus padres, algo que no se vivía desde hace siglos...
una pena en conclusión, como ves el pesimismo mi invade y me lleva a pensar que quizás sea mejor abandonar de nuevo este país que no aprende de sus errores y que cae siempre en la misma pidra...pero por otra parte quiero luchas por cambiarlo
Entre mis preferidos estaba, SorAngustiasdelaCruz, aquellos arrebatos que tenía eran geniales...
ResponderEliminarBesicos.
Carolvs: creo que estamos al final de un ciclo y no me refiero sólo al político, también al social, al económico, al cultural. La situación es mala, pero no sólo por el paro y la ineptitud de nuestros gestores. Creo que el modelo que nos proponen desde Europa tampoco es el adecuado. Creo también que hay gente muy decente entre los del 15 M. Hay radicales, como en el fútbol e infiltrados para cargarse el movimiento, porque no interesa que nada cambie. O hay una regeneración profunda o esto se nos va de las manos.
ResponderEliminarUn saludo.
Cabopá: muy "irreverente" lo de sor Angustias. Eran historias con una estética fea y con un contenido gamberro.
ResponderEliminarUn saludo.
Alejandro: conocidas y leídas. Tenían su público, claro.
ResponderEliminarUn saludo.
Manuel: Sin querer has hecho el comentario en otra entrada, así que lo repetiré en esta, no vayas a pensar que soy un desconsiderado. Jejeje.
ResponderEliminarNo te falta razón. Este un país hortera que valora la estupidez humana por encima de la cultura.
Un saludo.
Su momento pasó.
ResponderEliminarSaludos
Antorelo: pues sí. Todo tiene su principio y su final.
ResponderEliminarUn saludo.
El humor caústico no tiene tanto público como nos gustaría. El Papus desapareció pero los dibujantes que mencionas han conservado el mismo espíritu peleón.
ResponderEliminarSaludos, compañero.
Nuestro Garito: en efecto, y muchos de ellos se pasaron a El Jueves, su sucesor natural.
ResponderEliminarUn saludo.
La irreverencia de esos primeros años de democracia fue auténtica. Rosendo tenía una canción, no me acuerdo si "Pan de higo", que decía:
ResponderEliminar"...me educo con el Papus no con el ABC".
Saludos.
Muy coherente y en la línea de Rosendo, loco por incordiar.
ResponderEliminarUn saludo.
Hola Cayetano. Te cuento que en Perú el suplemento de humor político más popular se llama "El Otorongo". Puedes chequearla aquí.
ResponderEliminarUn saludo.
Arturo. Muy bueno ese enlace que me mandas. Me ha gustado la viñeta que dice algo así: cuando los pobres protestan, cierran las carreteras. Cuando lo hacen los ricos, cae la Bolsa.
ResponderEliminarUn saludo.
"Mataréis al bufón.No a la sonrisa" tiene cierta similitud con las sentencias de Galeano.
ResponderEliminarMe hizo recordar la ironía de una de sus frases:"Podrán prohibir el agua pero no la sed".
Abrazos.
Sí, Carmela. Tiene un aire a Galeano esa frase.
ResponderEliminarUn saludo.