lunes, 12 de diciembre de 2016

Gabinete psicoterapéutico



En una entrada de hace un año podíamos leer...


“Esta mañana Manuel ha salido de casa. La calle amaneció cubierta por una espesa capa de nieve. Falta muy poco para la Navidad y el barrio parece una postal -típica y tópica-  que podría servir de decorado para estas entrañables fiestas. 

El destino de Manuel es la consulta de Ariadna González, afamada especialista que regenta un prestigioso gabinete de psiquiatría y psicoterapia. 
Manuel tiene cita concertada, como viene siendo habitual desde hace un mes, todos los miércoles de 12:30 a 1. 
Lo que desconoce Manuel, nuestro paciente, es que, mientras él está tumbado en el diván y cuenta sus cosas, ella se entretiene ese día en hacer la lista de la compra: 

Pan, azúcar, leche desnatada…  (*)

Anota en su libreta. Hace que escucha, pero está ausente. Su semblante, sin embargo, permanece atento y serio como requiere el relato del paciente. De vez en cuando asiente con la cabeza… 

Y el del diván sigue con su patética historia: 

- Siento que nada tiene sentido. Creo que tiré mi vida a la basura… 

Bolsas de basura, bote de detergente, suavizante para la lavadora… 

La doctora Ariadna desconecta a ratos de las “confesiones” de este maníaco obsesivo compulsivo con tendencia depresiva. Su caso es evidente. Requiere medicación adecuada y que crea que el especialista le escucha…”  

(*) Basado en una ocurrencia del amigo Gabriel Beguerie



Esto ocurría poco antes de la navidad del año pasado:
http://latinajadediogenes.blogspot.com.es/2015/12/la-psicoterapeuta-un-cuento.html

El personaje central de Desde el laberinto acudía a consulta. 
Una pequeña travesura que me permití con permiso de los personajes de la obra.
Algo distendido, como corresponde al espíritu festivo de estas fechas.
Unos días después acudía también como paciente el propio Minotauro. Parecía bastante deprimido:

El Minotauro navideño de Leal Galera,
con un ejemplar de "Desde el laberinto" en la mano.


- El laberinto ya no es lo que era. Desde que lo convirtieron en una atracción turística, no para de venir gente. Acuden en grupo, armados con sus “gepeeses” para no perderse: “en la siguiente intersección, gire a la izquierda y coja la segunda galería que se encuentre a su derecha y camine recto unos doscientos metros."  

La doctora le escucha y duda entre aumentarle la dosis de diazepam o recomendarle que se tome unas vacaciones o que se busque una novia. 

- Vienen con sus cámaras fotográficas, sus smartphones y sus palos de selfies y no paran de retratarse, dando gritos como posesos. Los niños lo tocan todo. Están muy mal educados. El otro día rompieron una estalactita. Y el seguro dice que no lo cubre. 

Cree que lo mejor es aumentarle la dosis. Está muy nervioso. Presenta un cuadro claro de ansiedad. 

- Además, el público se comporta como si estuviera en el cine. Lo deja todo perdido de palomitas y envases de cocacola vacíos. 


Eso pasaba hace un año.
http://latinajadediogenes.blogspot.com.es/2015/12/la-psicoterapeuta-segunda-parte.html

La novedad es que hoy, precisamente hoy, ha pedido cita para acudir a consulta … nada menos que Ulises, el rey de Ítaca. Creo que anda con un síndrome muy peculiar. 
En unos días veremos qué nos cuenta…

32 comentarios:

  1. :) :) Que bueno¡ Ya con ganas de saber que le pasa a nuestro particular Ulises, ¿cual será su síndrome?...
    Saludos, Cayetano¡

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  2. Creo que esto se nos pone interesante.
    Salut.

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    1. El amigo Félix me dice en facebook que a mis personajes les da el bajón en estas fiestas. Jejeje.
      Un saludo, Miquel.

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  3. ¡Madre mía! La doctora va a aumentar los honorarios de su consulta. Semejante paciente la catapultará a la fama y a la gloria. ¡Ser elegida por el rey de Ítaca!

    Feliz tarde

    Bisous

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    1. Si le sale bien la cosa puede montar hasta una clínica dental, que dicen que da dinero.
      Feliz tarde, madame.
      Besos.

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  4. No sé qué es mejor si la lista de la compra de la psicoterapeuta o la lista de destrozos del laberinto que enumera el Minotauro. Estoy deseando saber qué síndrome "peculiar" presenta Ulises.
    Un abrazo Cayetano

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    1. LO del laberinto es que no tiene nombre. Los padres dejan a los niños sueltos y la lían buena. Ya no guardan la compostura debida ni en el cine ni en los parques temáticos como este.
      Ulises va a dar nombre a un síndrome muy peculiar que hoy padecen muchos.
      Un abrazo, Ambar.

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  5. Quizás la psicóloga considerará que el pobre Ulises padece el famoso síndrome que lleva su nombre, el del emigrante:

    https://es.wikipedia.org/wiki/S%C3%ADndrome_de_Ulises

    Pero tal vez se desdiga para después reconsiderarlo de nuevo y así sucesivamente no cayendo en la cuenta que, realmente, lo que le ocurre al pobre Ulises es que Penélope no termina de tejerle su bufanda porque él no para nunca en casa.

    https://es.wikipedia.org/wiki/Complejo_de_Pen%C3%A9lope

    Vaya, un lío colosal!!

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    1. Buena puntería, El peletero.
      Al final resultó que Ulises era un tipo de lo más normal, con sus depresiones y todo. La leyenda es lo que tiene. Veremos qué nos cuenta este hombre.
      Un saludo.

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  6. ¿Síndrome de Ulises? Pinta muy interesante. Espero que no le tenga fobia a las sirenas. A las de las ambulancias, claro.

    Un saludo.

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    1. Eso es. Síndrome de... él mismo. Creo que Ulises tiene más fobia a la leche de cabra y al queso feta que a las propias sirenas.
      Un saludo, Carlos.

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  7. Hola Cayetano:

    A ver que nos cuenta Ulises...Lo cierto es que seguro nos sorprenderá...

    Saludos

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    1. Eso. A ver qué nos cuenta. Creo que le han dado hora para el día 18.
      Un saludo, Manuel.

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  8. Estoy entusiasmadaaaaa y espero disfrutar con las penas de Ulises. Jajj ya se sabe eso de que mal de muchos......alegría de una boba como yo.

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    1. Jejeje. Consuela mucho, es verdad, ver las penas ajenas, sobre todo cuando son de ficción. Por eso vamos al cine.
      Saludos, Emejota.

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  9. ¿Necesitará la doctora Ariadna Gonzáles una ayudanta? Si es así yo estoy dispuesta, entonces mientras ella hace la lista de la compra, yo escucheré entusiasmada a Ulises.
    Espero a ver que cuenta en el divan.

    Un abrazo.

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    1. Se lo preguntaré a ver, no sea que necesite una ayuda estos días tan ajetreados. Jejeje.
      Un abrazo, Conchi.

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  10. Uy, me dejas preocupada. ¿Será que no le guste la Navidad? ¿Que se ha perdido una vez en su laberinto y que le ha costado regresar a la salida? ¿O que no entiende a los políticos de hoy? Me temo que a esto último la doctora no tendrá respuesta posible y mientras le escucha seguirá confeccionando la lista de la compra...
    Un saludo

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    1. Debe andar algo deprimidillo el hombre con tanto trajín... Veremos qué nos cuenta Ulises en unos días.
      Saludos, Carmen.

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  11. Bueno, sea lo que sea, el caso es que no podía caer me mejores manos. Una doctora ya experimentada vale mucho, y si tiene la nevera llena, como es es el caso, para ofrecer un coctel de bienvenida, tanto mejor.
    Saludos.

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    1. Un cóctel sin alcohol, que los ansiolíticos y antidepresivos pueden tener efectos sorprendentes si los mezclas con bebidas "espirituosas".
      Un saludo, DLT.

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  12. En un plísplás has presentado un documental con las reflexiones de tres mentes. Tres mundos reales, incluido el de nuestro amigo Mino. A ver con qué problema personal se descuelga mi admirado Ulises.
    Quedo a la espera

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    1. Este astuto Ulises es capaz de sorprendernos con cualquier cosa. Un artista del engaño. Para mí que lo que tiene es cuento y quiere la baja laboral.
      Un saludo, Ana Mª.

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  13. Intrigada estoy. Estaré atenta esta vez.
    Besos

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    1. No sé qué nos querrá contar el amigo Ulises. Igual requiere medicación.
      Un abrazo, Arantza.

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  14. Muy bueno, Cayetano, has plasmado algunas de las dolencias de nuestra época.
    Un saludo.

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    1. Las sociedades modernas se alejan de los confesores de las iglesias y los sustituyen por psiquiatras y psicoterapeutas. En vez de rezos te mandan ansiolíticos.
      Un saludo, Valverde de Lucerna.

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  15. Divertidísimo el estrés del Minotauro; es que con tanto GPS y turista, se ha perdido la esencia del proceso de autoconocimiento. Metáfora clara de los tiempos que corren.

    Besos iluminados. Voy a ver como la está pasando Ulyses.

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    1. Has dado en el clavo: bromas aparte, la parodia del minotauro es una metáfora de estos tiempos que corren, tan ingratos con la cultura clásica.
      Un abrazo, Myriam.

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  16. Esa doctora se va hacer famosa entre los ya famosos, ahora le toca a Ulises, veremos que le dice.
    Besos Cayetano-.
    Puri

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